Las barcelonesas ganan todavía un 22% menos que los hombres
La brecha salarial se reduce mínimamente y es aún enorme en todas las profesiones y categorías
La brecha salarial entre los trabajadores y trabajadoras de Barcelona, que se ensanchó durante los peores años de la crisis económica, se mantiene en tiempos de relativa recuperación. Un estudio llevado a cabo por el Gabinete Técnico de Programación del Ayuntamiento a partir de la Muestra Continua de Vidas Laborales (MCVL) del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) con datos correspondientes al 2016 revela que la diferencia entre el salario medio de un hombre y de una mujer en la capital es de un 21,8%. Dicho de otro modo, mientras que la media de ingresos brutos de un barcelonés fue en ese año de 32.819 euros, el de una barcelonesa fue de sólo 25.669, es decir, 7.150 euros menos.
El informe publicado ahora por el Ayuntamiento actualiza los datos que avanzó La Vanguardia (15 de febrero del 2017) con las estadísticas correspondientes al año 2015. También confirma la plena vigencia de una realidad incontestable: el agravio comparativo de las retribuciones en función del sexo de los trabajadores. Cierto que en un año la diferencia bajó del 22,8% (2015) al 21,8% (2016), pero la brecha sigue siendo profunda en todas las edades, oficios y categorías profesionales.
Las estadísticas analizadas tienen en cuenta los salarios de las personas asalariadas del régimen general de la Seguridad Social –excepto los trabajadores del hogar– que residen en Barcelona. Comparando los ingresos medios de una persona que vive en esta ciudad con los salarios de Catalunya y España se observa una notable diferencia: los 29.176 euros brutos anuales de Barcelona representan un 14,5% más que los 25.491 euros de Catalunya y un 23,2% más que los 23.677 euros de España.
Los años de crisis y la creciente precarización laboral han provocado una caída de los salarios de los trabajadores más jóvenes. De los 10.174 euros anuales que cobraban de media los trabajadores residentes en Barcelona y menores de 24 años se ha pasado en el 2016 a una retribución de sólo 8.536 euros. En esta franja de edad la diferencia salarial entre hombres y mujeres es de casi 2.000 euros. El desequili- brio de ingresos en función del sexo se mantiene en todos los grupos de edad y supera los 12.000 euros al llegar a la prejubilación (entre los 60 y los 64 años) .
El estudio permite, por otra parte, comparar los ingresos de los asalariados españoles con los de otras nacionalidades. Los primeros percibieron de media el año 2016 30.588 euros brutos, 13.000 más que un trabajador procedente de la América Latina y más del doble que uno del resto del mundo (sin contar la Unión Europea).
Por sectores económicos y profesiones, los salarios más altos corresponden a aquellas personas que se dedican a las actividades financieras y de seguros. Sus ingresos –casi 52.000 euros brutos anuales– triplican los de un auxiliar administrativo. El informe elaborado con los datos del 2016 compara un total de 17 sectores profesionales distintos. En todos y cada uno de ellos, sin excepción, las desigualdades salariales entre hombres y mujeres son más que evidentes. Da igual que se trate de las profesiones mejor pagadas (en el sector financiero,
UN ABISMO POR MEDIO En el sector de finanzas, el mejor pagado, la diferencia por géneros supera los 20.000 euros
DE MAL EN PEOR La precarización laboral ha rebajado los sueldos de los trabajadores jóvenes
62.089 euros de media los hombres y 41.683 las mujeres) que de las peor retribuidas (en la hostelería, 16.483 y 15.022, respectivamente).
Exactamente lo mismo sucede cuando se cotejan las categorías profesionales. El salario medio en el 2016 de un alto directivo, ingeniero o licenciado se elevó a los 59.220 euros (una cantidad inferior en unos 2.000 euros a la del año 2010). Una mujer con la misma categoría profesional percibió un sueldo mucho más bajo (43.958 euros). No hay una sola excepción en todo el informe a la realidad de la brecha salarial por razón de género. Así, entre los trabajadores situados en el nivel más bajo de la escala salarial (los que no tienen calificación y los menores de 18 años) la distancia es de 2.600 euros (11.400 las mujeres y 14.000 los hombres).
En su valoración del informe, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, destaca que, a pesar de la recuperación económica, la situación del mercado laboral, en especial en lo que se refiere a la precarización del trabajo, sigue siendo “preocupante”. En este sentido, reitera el compromiso del Ayuntamiento por impulsar en lo que queda de mandato el salario mínimo de ciudad (1.000 euros) a pesar de que el Consistorio no tiene competencias en la materia. Esta cuestión está en manos del Consell Econòmic i Social de Barcelona, que ha incorporado a las pequeñas y medianas empresas y al mundo cooperativo y que actuará en esta materia como mesa de concertación.
Pisarello reitera el compromiso de concertar la medida en lo que resta de mandato
El sueldo medio anual de una joven menor de 24 años es de sólo 11.400 euros