Saó del Coster invierte 1,2 millones en el Priorat
La bodega se centra en promocionar la cultura del vino
Saó del Coster invierte 1,2 millones de euros en la construcción de una nueva bodega que priorizará el ahorro energético y que se quiere convertir en un referente de la promoción de la cultura del vino del Priorat. El proyecto, que tiene como socios mayoritarios a amantes del vino suizos, se fundó en el 2004 rehabilitando una antigua casa de la calle Valls de Gratallops para convertirla en una bodega. Están de alquiler desde entonces. Ahora ya han empezado las obras de la nueva bodega en el número 1 de la calle Piró de Gratallops, justo en el centro del pueblo. Las obras, que se han encargado a Constecnia siguiendo un proyecto del despacho de arquitectura Harquitectes, se alargarán por espacio de 14 meses. La nueva bodega tiene capacidad para elaborar 100.000 botellas pero no quieren superar las 70.000.
El gerente de la bodega, Xavier Barrachina, afirma que “no podemos convertir el Priorat en un centro de referencia reconocida como es Saint-Émilion, la Toscana o Châteauneuf-du-Pape sin generar espacios donde promocionar la cultura del vino”. Barrachina añade que desde su bodega “queremos abrir el Priorat y elaborar vinos artesanales y respetuosos con el territorio”. Aplican la filosofía de la mínima intervención tanto en la agricultura como en la bodega, respetando los ciclos de la naturaleza, realizando tratamientos biodinámicos en sus fincas, labrando con mulas y siguiendo el calendario lunar para todas las labores en las viñas y en la bodega. Elaboran vinos para todos los bolsillos y vinos icono como los cariñenas de viejas viñas Planassos (105 euros) y La Pujada (120 euros).
Los suizos Michel Grupper y Joel Chevallaz lideran el grupo de socios, entre los que está también Xavier Barrachina. Saó del Costero cerró el ejercicio con una facturación de 300.000 euros después de crecer un 20% en el último año. Elaboran en el Priorat 33.000 botellas. Además, comercializan 12.500 botellas de un blanco elaborado en la DO Rías Baixas (X de Saó). Exportan el 60% de sus vinos, principalmente a Suiza, Reino Unido, Alemania y EE.UU. Ahora se han marcado como objetivo crecer más en Catalunya (donde comercializan el 95% de las botellas que venden en España). Las ventas en la provincia de Tarragona suponen el 30% de su facturación y quieren crecer especialmente en Barcelona.
La empresa factura 300.000 euros, exporta el 60% de sus vinos y quiere crecer en Catalunya