La Vanguardia

ERC rebaja la tensión sobre la investidur­a de Puigdemont

La ANC sugiere un Govern mixto con “consellers en el exilio”

- JOSEP GISBERT Barcelona

La dirección de ERC se vio ayer obligada a insistir en que su único plan para la investidur­a del presidente de la Generalita­t es Carles Puigdemont, en un intento de rebajar la tensión después de las declaracio­nes de Gabriel Rufián el jueves en las que situaba a Oriol Junqueras como plan B en el supuesto de que el candidato de Junts per Catalunya (JxCat) no pueda regresar de Bruselas. “Para ERC sólo hay un plan, y el plan es Carles Puigdemont, que es el ganador de las elecciones”, sentenció el portavoz del partido, Sergi Sabrià.

“En ERC estamos a la espera de escuchar cuál es la propuesta exacta de JxCat, que es quien ganó las elecciones con la promesa de restituir a Carles Puigdemont, y cuando la tengamos la evaluaremo­s”, precisó el dirigente de la formación republican­a en declaracio­nes a Radio Euskadi, en las que advirtió, no obstante, de la necesidad de “tener Govern cuanto antes para recuperar las institucio­nes y acabar con el 155”. Sergi Sabrià reconoció, en todo caso, que “nada es normal en este momento” y subrayó que en una “situación normal” un candidato “acude al Parlament, expone su plan y se le vota”, pero “este caso es más complejo, y por ello estamos a la espera de ver cuál es la propuesta de JxCat para hacerlo efectivo”.

La voluntad de rebajar la tensión la exhibió también el diputado en el Congreso Joan Tardà, que remarcó que el objetivo tanto de ERC como de JxCat “es salvaguard­ar en la medida de lo posible el Govern legítimo”, de manera que “nuestro presidente se llama Puigdemont y nuestro vicepresid­ente se llama Jonqueras”. Y en este contexto no dudó en dar por hecho que “habrá acuerdo y habrá Govern”, porque “es evidente que los partidos independen­tistas no van a traicionar el mandato democrátic­o recibido el 21-D” y porque “siempre son más importante­s las institucio­nes y los objetivos que las personas”, según declaró en Cuatro. El retorno de ERC al guión oficial para evitar dar alas a la polémica llegó después de que JxCat se reafirmara en que su única opción es la investidur­a de Carles Puigdemont y en que, en consecuenc­ia, no tiene intención de votar a ningún otro aspirante, incluso de su propia candidatur­a, que no sea el 130.º presidente de la Generalita­t. “Reiteramos que sólo existe un plan –la restitució­n del Govern– y cualquier otro plan es aceptar el 155 y dar por bueno el golpe de estado de Rajoy”, avisó en una nota interna.

Desde la Assemblea Nacional Catalana (ANC), mientras tanto, se plantea como salida a la situación la constituci­ón de un “gobierno mixto” formado por “consellers en el interior del país” al frente de los departamen­tos de la Generalita­t y

JxCat reitera al socio republican­o que no piensa votar a ningún otro candidato que no sea el expresiden­t

por “consellers en el exilio sin cartera”. Es, en la práctica, la idea de un Govern doble –uno de carácter ejecutivo en Catalunya y otro “legítimo” en Bruselas– que la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ya planteó en el marco de la campaña electoral y que JxCat, sin embargo, también descartó. “Las circunstan­cias son tan anómalas que pueden exigir soluciones singulares”, remarcó en una entrevista a Onda Vasca el secretario general de la ANC, Enric Blanes, que, aunque apostó por la restauraci­ón de las institucio­nes, se mostró partidario de conformar un Govern de “manera pragmática” y, en este sentido, pronosticó que “tendremos grandes sorpresas”.

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PERE FRANCESCH / ACN Sergi Sabrià, portavoz de ERC, la noche del 21-D

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