Una decena de hospitales sirios, alcanzados por ataques aéreos
Una decena de hospitales en territorios todavía controlados por las milicias sirias han sido alcanzados en ataques aéreos o en bombardeos de artillería en los últimos diez días. Así al menos lo han denunciado trabajadores humanitarios.
La provincia de Idlib y el reducto de Guta Oriental, en las cercanías de Damasco, son objetivo de una ofensiva de las fuerzas leales al presidente Bashar el Asad. En Guta, donde la ofensiva comenzó el 29 de diciembre, al menos 17 civiles murieron ayer y decenas más resultaron heridos por bombardeos y fuego de la artillería gubernamental, según informaron activistas sirios.
Entre los fallecidos se encuentran dos niños y tres mujeres, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que no descartó que aumenten las víctimas mortales, pues hay numerosos heridos graves y desaparecidos bajo los escombros. Los bombardeos aéreos causaron al menos doce muertos, entre ellos dos niños y tres mujeres en la localidad de Hamuria, donde también hubo varios heridos. En Arbín hubo al menos tres muertos, y en Midera, otros dos y seis heridos.
De otro lado, entre los centros médicos afectados por bombardeos en la provincia de Idlib se cuentan un hospital maternoinfantil en Marat al Numan, que ha sido blanco de ataques aéreos tres veces en los últimos cuatro días. En el peor de ellos, el miércoles pasado, perecieron cinco personas, según la Syrian American Medical Society, citada por la BBC.
El coordinador humanitario de la ONU para Siria, Jan Egeland, dijo en un comunicado que “desde el inicio de la crisis ha habido cientos de ataques, bien documentados, a instalaciones médicas. Es vergonzoso que no haya habido nunca una denuncia formal de estos crímenes de guerra, y eso perjudica seriamente la credibilidad de las Naciones Unidas”.
Hamish de Bretton-Gordon, que asesora a entidades médicas que aún trabajan en la zona, señaló a la BBC que en Guta Oriental hay más de 125 niños que necesitan ser intervenidos quirúrgicamente de urgencia. “Hay un bebé de seis meses que ha perdido un ojo y que morirá si no es operado, y una niña de ocho años que pesa tan sólo ocho kilos y se está muriendo de desnutrición”.
Según el último recuento del Observatorio de Derechos Humanos, desde el inicio de la última ofensiva en Guta Oriental han fallecido 96 civiles por bombardeos y fuego de artillería, entre ellos 21 menores y 22 mujeres.