La Vanguardia

Póquer de reyes

- Mariángel Alcázar

El 6 de enero de 1986, cuando apenas le faltaba un mes para cumplir la mayoría de edad y jurar la Constituci­ón como heredero, Felipe de Borbón, a la sazón príncipe de Asturias, acudió por primera vez a la celebració­n de la Pascua militar, luciendo su uniforme de caballero cadete de la Academia General Militar. El Príncipe había empezado hacía unos meses, en Zaragoza (Tierra), el primero de los cursos de formación militar que durante tres años le llevarían también a Marín (Armada) y a San Javier (Aire). Pasados 32 años, aquel cadete se presentó ayer como “mando supremo de las fuerzas armadas”, para felicitar, en nombre de toda la milicia, al “antiguo capitán general”, por sus 80 años de vida. El anterior jefe de todos los ejércitos era el rey Juan Carlos, quien lo fue, como ahora lo es su hijo, por su condición de jefe del Estado, pero nadie olvida que fue, precisamen­te, vestido de uniforme como grabó en la memoria colectiva el episodio más glorioso de su reinado la noche del 23 de febrero de 1981.

Que el primero de los homenajes públicos que tendrán lugar a lo largo del 2018 por su aniversari­o se produjera ayer en un acto militar no fue una casualidad.

Por primera vez desde el relevo en el trono, el rey Juan Carlos participó ayer de un acto institucio­nal junto a su hijo y sucesor. Después de más de tres años en un limbo institucio­nal en el que él mismo, con la aquiescenc­ia y el alivio de la Zarzuela, se ha situado para poner distancia y, de algún modo, purgar los acontecimi­entos de la última etapa de su reinado, Juan Carlos de Borbón empieza a ocupar el sitio que le correspond­e. A pesar de tener su despacho oficial en el palacio Real, el rey Juan Carlos, cuando va, sólo utiliza unas dependenci­as ubicadas en la planta baja con ventanas a la plaza de Oriente.

Desde su última y rápida aparición en el balcón principal el día de la proclamaci­ón del rey Felipe, el padre no había paseado por los salones de la planta noble de palacio. No tenía buen recuerdo: fue precisamen­te el 6 de enero del 2014 cuando, atravesand­o una crisis institucio­nal, con evidentes problemas de movilidad y tras perder el hilo del discurso, el entonces jefe del Estado decidió que había llegado el momento de abdicar. De regreso a la Zarzuela, comunicó al jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, que le preparara un informe sobre cómo y cuándo hacer el relevo. El anuncio de la abdicación se produjo el 2 de junio del 2014. Dos semanas después, su hijo fue proclamado Rey.

Desde el 2005, tras la boda de Felipe y Letizia, en la Pascua militar estuvieron presentes los Reyes y los príncipes de Asturias. Los primeros, delante, y los segundos, detrás. Ayer se cambió el orden y por primera vez Juan Carlos I fue el segundo, o el tercero si contamos que, según el orden de prelación, la reina Letizia le antecede.

El rey Juan Carlos se mostró eufórico tras la celebració­n familiar de su 80.º aniversari­o con asistencia de todos sus parientes y a pesar de la ausencia destacada de la infanta Cristina y su familia. Existen indicios de que el rey Juan Carlos, al igual que su hija menor, ha pasado esta semana unos días en Roma, la ciudad donde nació el 5 de enero de 1938.

Reencontra­rse con la cúpula militar y que, por primera vez en casi cuatro años, su hijo le diera las gracias en público por “tantos años de servicio leal a España” fue su mejor regalo de cumpleaños. El Rey recordó el ejemplo de su padre “vistiendo el uniforme y siempre velando por la excelencia y el compromiso de nuestras fuerzas armadas con la democracia, la libertad y la seguridad”.

Prueba de que la Zarzuela ha tomado nota del disgusto del rey Juan Carlos al no ser convocado, el pasado mes de junio, a la conmemorac­ión en el Congreso del 40.º aniversari­o de las primeras elecciones democrátic­as tras la Guerra Civil es que igual que se justificó su ausencia en actos institucio­nales, alegando que sólo había lugar para el actual jefe del Estado, ahora se promueve que el anterior pueda estar presente por los méritos acumulados durante el ejercicio de sus funciones; unos méritos que, de alguna manera, justifican la continuida­d del sistema de monarquía constituci­onal. De repente todo encaja, tanto como que la reina Letizia, con vestido abotonado de terciopelo azul prusia de Felipe Varela, se conjuntara con el uniforme de almirante de la Armada del rey Felipe, y el conjunto de falda y chaqueta de Margarita Nuez de la reina Sofía, en seda metalizada estampada en rosa y tonos tierra, hiciera juego con el caqui del uniforme de capitán general (en la reserva) del rey Juan Carlos.

Felipe VI, como “mando supremo de las FAS”, felicitó por su 80.º aniversari­o al “antiguo capitán general” El anterior jefe de Estado no había pisado el salón del Trono desde su última Pascua militar en el 2014

 ?? DANI DUCH ?? Los Reyes entran en el salón del Trono del palacio Real seguidos por Juan Carlos y Sofía
DANI DUCH Los Reyes entran en el salón del Trono del palacio Real seguidos por Juan Carlos y Sofía
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain