Tres de cada cuatro docentes aseguran que no tienen autoridad
Una encuesta de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) realizada a dos millares de docentes de Catalunya muestra el descontento de los profesores que afirman sentirse poco respetados por sus alumnos y, en una creciente tendencia, por las familias. Así, en el estudio presentado ayer por Ferran Barri, coordinador del sector de educación del CSIF en Catalunya, el 90% de los profesores respondieron que conviven con frecuencia con situaciones de violencia, de mayor o menor intensidad, en el centro escolar. Se trata mayormente de faltas de respeto a la figura de autoridad en el aula aunque también se han reportado de forma aislada insultos, amenazas y agresiones físicas.
El representante del CSIF explicó que se trata de “conductas disruptivas”, como alumnos que se levantan sin pedir permiso, lanzan papeles, no dejan hablar o faltan al respeto. “Los casos de agresiones físicas y amenazas son aislados”, añadió. Estas incidencias se agravan en la etapa de secundaria, debido a la edad de los chavales y al perfil de los profesores, que, según la central, pueden ser excelentes docentes de su especialidad pero carecen de habilidades y estrategias para mantener el control en el aula.
“No se les ha enseñado a dar clase ni a relacionarse con alumnos con comportamientos anómalos”, apuntó Barri. Tres de cada cuatro docentes considera que les falta autoridad en el aula, una tendencia que, según el sindicato, va al alza debido a la depreciación del rol social del profesor en la actualidad.
En este contexto, el 30% de profesores de instituto afirma no tener buena relación con sus alumnos adolescentes (un 10% en el caso de maestros de primaria) y el 29% del conjunto sostiene que la relación que tiene con las familias de los estudiantes es mala, por desavenencias o por nula colaboración de los padres en la educación del menor. Los resultados del informe corroboran la idea de que “el profesorado no está satisfecho con el resultado de su trabajo” lo que le obliga a estar “constantemente en guardia”, situación que puede llegar a provocarles estrés y depresión, explicó Barri. El estudio fue realizado por la central entre los meses de noviembre y enero a 800 maestros de primaria y 1.200 profesores de secundaria de Catalunya. Con el objetivo de que los docentes trabajen en un ambiente propicio, la central sindical lanza el programa CSIF Ayuda Profes para informar, asesorar y apoyar a los profesionales
Barri también anunció que reclamará al nuevo Govern la devolución de pagas extra que la administración dejó de abonar durante la crisis y que pueden ascender a unos 5.000 euros por profesor.
El 30% del profesorado dice tener mala relación con los alumnos y no sentirse apoyado por las familias