El arte suple al petróleo
Los emiratos de Abu Dabi y Sharyah apuestan por la cultura para buscar nuevas fuentes de riqueza y atraer otro turismo
La exposición del Macba está ubicada en el Manarat al Saadiyat, que fue el primer centro cultural abierto en la isla de Saadiyat (Felicidad). A poco más de un kilómetro está el nuevo Louvre de Abu Dabi, con edificio de Jean Nouvel, que fue inaugurado hace tres meses, y cuyas primeras cifras de visitantes auguran un éxito de público que puede relanzar otros proyectos.
En la misma isla se está construyendo ya el museo Museo Nacional Sheihk Zayed, diseñado por Norman Foster, y estaba previsto construir otro museo Guggenheim, a cargo de Frank Gehry, y un Centro de Artes Escénicas, con diseño de Zaha Hadid, que hizo la maqueta poco antes de morir. Estos dos últimos están ahora paralizados y probablemente su futuro vaya ligado a la acogida de este nuevo Louvre.
La apuesta de Abu Dabi por los museos responde a las reformas impulsadas por el jeque Zayed, consciente de que las reservas de petróleo tienen los años contados y para mantener el ritmo de desarrollo del país deben diversificar las fuentes de ingresos.
No es casualidad que a la inauguración de la exposición del Macba asistiera el ministro de la Tolerancia de los Emiratos Árabes Unidos Nahayan Mabarak al Nahayan, antiguo ministro de Cultura, quien además tuvo el detalle de recibir al día siguiente a una delegación del Macba. Su presencia contrastó con la ausencia de autoridades españolas y catalanas, a excepción del embajador Antonio Álvarez.
Hace ahora dos años el Gobierno de los Emiratos emprendió una serie de cambios que incluyeron la designación de tres ministros de la Tolerancia, la Felicidad y el Futuro.
Al de Cultura se le añadió además el área de Desarrollo Social y se creó también el ministerio de la Juventud, adjudicado a una mujer de 22 años.
El Estado de los Emiratos Árabes Unidos es una federación de siete entidades autónomas bajo el paraguas de una monarquía y un gobierno único que gracias al petróleo se ha convertido en uno de los países más ricos. Favorecido por la estabilidad política y su relativa neutralidad en el hervidero de Oriente Medio, ha impulsado una política de aperturas que ha favorecido el turismo.
El emirato de Dubai se ha convertido en un hub financiero y en sede de grandes multinacionales. El emirato de Abu Dabi ha apostado por la cultura y la subsede del Louvre es hoy su gran emblema. Sharjah, el tercer emirato en tamaño, es conocido también por su compromiso con las artes y la cultura. En 1998, la ciudad de Sharjah fue designada capital cultural del mundo árabe por la Unesco y desde 1993 organiza una Bienal Internacional de Arte. En la ciudad se han instalado numerosas galerías, que complementan una rica oferta museística.
En el 2019, en la Sharjah Art Foundation, se presentará la exposición del fotógrafo libanés Akram Zaatari, que se pudo ver el año pasado en el Macba, coorganizada precisamente por este museo y el de Arte Contemporáneo de Corea.