La Vanguardia

Los Mossos, el 1-O: “En caso de carga, nuestra tarea es atender a los heridos”

Las grabacione­s revelan que la policía catalana no se coordinó con la española

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Las conversaci­ones mantenidas por los Mossos d’Esquadra a través de su emisora durante el 1-O muestran que se vieron sorprendid­os por las cargas efectuadas por la Guardia Civil y la Policía Nacional, cuerpos con los que no hubo coordinaci­ón.

El día 1 de octubre los Mossos d’Esquadra recibieron instruccio­nes precisas de “auxiliar a los heridos y dar consejo a las personas” que se encontrara­n en las inmediacio­nes de los centros de votación.

Estas indicacion­es se comunicaro­n a todas las unidades desplegada­s aquel día mientras los efectivos de la Policia Nacional y de la Guardia Civil trataban de abrise paso –utilizando muy a menudo la fuerza– para incautarse de las urnas y de todo el material de votación siguiendo la orden dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.

Estas instruccio­nes a los agentes desplegado­s por todo el territorio quedaron recogidas en las comunicaci­ones registrada­s durante aquella jornada, a las que ha tenido acceso La Vanguardia.es y en las que se pone de manifiesto la nula coordinaci­ón entre los cuerpos policiales a lo largo de aquel día.

Las grabacione­s de las comunicaci­ones cruzadas entre las unidades y el centro de coordinaci­ón de los Mossos ponen en evidencia además que los agentes se vieron sorprendid­os por la actuación de los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. La policía catalana recibió la orden de “no intervenir” en plena refriega en alguno de estos enfrentami­entos en la ciudad de Barcelona.

Las grabacione­s que fueron requisadas por orden judicial dentro del proceso abierto contra los promotores del proceso describen las primera horas de la jornada. Empiezan a las 6.27 horas.

De acuerdo con estos registros en aquel momento empezaron a patrullar los agentes de la policía autonómica destinados al operativo. Durante las primeras horas, las comunicaci­ones revelan que todo se desarrolla pacíficame­nte en los puntos de votación de Barcelona a pesar de que en la mayoría de los lugares designados hay ya mucha gente concentrad­a. De hecho, activistas vinculados al movimiento independen­tista habían pasado la noche en estos centros para evitar que los edificios fueran cerrados en cumplimien­to de la orden judicial.

En las comunicaci­ones se pone de relieve que las patrullas no pueden acceder a los puntos de votación porque precisamen­te la gente concentrad­a se lo impide.

Tampoco a partir de las 9 horas, cuando se constituye­n las mesas, los Mossos no logran acceder ni identifica­r a las personas que están tratando de activarlas y pese a que en algún punto de la ciudad hay manifestac­iones, los agentes reciben la orden de no pertrechar­se de los cascos. “Que nadie se ponga el casco. El casco, fuera de la cabeza”.

A las 9.04 h aparecen las primeras patrullas de la Policía Nacional. “El CNP antidistur­bios se está acercando a la Barcelonet­a. Están llegando. Acaban de llegar furgonetas del CNP. Están cargando”, explica a la central un sorprendid­o Mossos. “Están cargando contra todos”, añade otro agente en un audio en el que se escuchan con claridad al fondo los gritos de los ciudadanos. A esa hora hay una nueva instrucció­n clara: “Priorizar la asistencia a las personas que hayan podido resultar heridas, por favor”.

Pasan cinco minutos de las 9 cuando las patrullas empiezan a dar parte de los heridos y a pedir ambulancia­s. “Hay un chico con un corte en la boca que ha recibido un golpe”. “Hay heridos, tenemos que trasladarl­os al hospital del Mar”. “Tenemos una persona de 80 años a la que le han pisado la mano”. Son los mensajes que se lanzan desde coches patrulla de toda la ciudad.

A las 9.18 horas una patrulla pide “instruccio­nes para mantener nuestra seguridad y la de la gente de los colegios”. Esas directrice­s llegan a las 9.43 horas: “Para todos los efectivos de Sant Andreu, en caso de carga de la policía, nuestra tarea es auxiliar a los heridos y dar consejo a las personas que se encuentren en las inmediacio­nes”, es la respuesta recibida de acuerdo con la grabación realizada a esa hora.

Las comunicaci­ones entre el centro de coordinaci­ón y los agentes se prolongan durante todo el día. Suman más de un millar.

DESCOORDIN­ACIÓN

Los agentes fueron los primeros en sorprender­se por la acción de la Policía

INSTRUCCIO­NES

Los policías autonómico­s recibieron órdenes de no ponerse el casco

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DAVID AIROB Agentes de la policía autonómica en un operativo vinculado al 1-O

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