La ACB firma la paz
Los jugadores de baloncesto y la liga ACB han llegado un acuerdo in extremis para el próximo convenio colectivo que permitirá jugar a partir de mañana la Copa del Rey, una competición que ha estado a punto de suspenderse, pues de haber seguido adelante la huelga no había posibilidad de encontrar fechas alternativas.
Después de muchas jornadas de tensión, durante las cuales la Copa del Rey de baloncesto estuvo en peligro, finalmente el torneo se celebrará con normalidad a partir de mañana. El Barcelona Lassa debutará en la jornada del viernes contra el Baskonia en los cuartos de final.
El desenlace es lógico por la imposibilidad de aplazar una competición de gran prestigio, a punto de iniciarse y también sin fechas para moverla en el calendario en este momento. No había otra salida y así lo entendieron las dos partes, la Asociación de Clubs de Baloncesto (ACB) y la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP), reunidas ayer en Madrid bajo el paraguas del Consejo Superior de Deportes. Aunque Alfonso Reyes, presidente de la ABP, y el sindicato habían tensado la cuerda en los últimos días rechazando las propuestas de la ACB, no había otra solución para evitar un ridículo histórico. “La ABP ha demostrado generosidad y altura de miras”, manifestó con ironía José Ramón Lete, presidente del CSD, aunque no quedó claro si se refería a la importancia del acuerdo o a la altura del exjugador Reyes (2,02 m). “Toca disfrutar de la Copa, nuestra joya de la corona”, comentó el exbaloncestista antes de dejar bien claro que “salimos con una nueva relación entre jugadores y clubs. Es un punto de partida muy importante para afrontar retos que tenemos que solventar”. Asimismo, recordó que “los jugadores lo han hecho porque sabían que podían mejorar el baloncesto para los actuales y los que vendrán en el futuro. A los jugadores nunca se les debe perder el respeto porque son los creadores del deporte”. “Sale ganando el baloncesto porque tenemos un marco de estabilidad para los próximos cuatro años”, concluyó Lete.
En efecto, en la reunión definitiva de ayer se alcanzó un acuerdo para resolver las diferencias del fondo social. En palabras de Esther Queraltó, secretaria general de la ACB: “El primer año la ACB pagará al sindicato 315.000 euros, la misma cantidad que el segundo. En el tercero la cifra será de 280.000 y el cuarto de 270.000”. Queraltó destacó también que “la negociación no se ha acabado. Seguiremos hablando sobre la base acordada”.
“Ha sido un momento de reivindicación importante. Hay una serie de mejoras que son buenas para sentar las bases o cimentar el deporte y sin las cuales hubiera sido muy difícil llegar a un acuerdo. Tenemos que estar muy contentos”, concluyó Reyes tras una reunión que da paso a partir de mañana a la competición con los partidos Valencia-Iberostar Tenerife y R. Madrid-Unicaja.