La Guardia Civil vincula a Artadi con la preparación del referéndum
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Un informe de la Guardia Civil destinado al juez Llarena sitúa a Elsa Artadi, mano derecha de Carles Puigdemont, como una de las personas que participaron en los preparativos para el referéndum del 1-O.
La investigación que lleva a cabo el juez Pablo Llarena puede ampliarse próximamente a tenor de los últimos informes que el magistrado ha recibido de la Guardia Civil. En ellos se señala a la diputada de JxCat Elsa Artardi como directamente vinculada a la organización del referéndum del 1-O, prohibido por el Tribunal Constitucional (TC). De hecho, los informes remitidos al juez –a los que La Vanguardia ha tenido acceso– sitúan a Artadi, persona de toda la confianza del expresidente Carles Puigdemont, en el eje de las tareas de preparación de la convocatoria del Govern para que los ciudadanos acudieran a votar.
La Guardia Civil llega a estas conclusiones a partir, sobre todo, del contenido de conversaciones telefónicas que Elsa Artadi sostuvo con Josep Maria Jové, exnúmero dos del vicepresidente Oriol Junqueras. Tales contactos se produjeron a comienzos de septiembre pasado. En uno de ellos, Artadi –que entonces era directora general de Coordinación Interdepartamental, dependiente de Presidència de la Generalitat–, trató con Jové sobre la fecha más conveniente para la publicación del decreto de convocatoria del referéndum.
La conversación se produjo la noche del 6 de septiembre. La Guardia Civil lo subraya para destacar que el contacto coincidía con la aprobación en el Parlament de las normas para la desconexión con el Estado. Jové estimó que la publicación de los correspondientes decretos debía producirse ese mismo día, porque ya estaban preparadas las cartas dirigidas a los ayuntamientos dispuestos a prestar sus locales para las votaciones.
La conversación discurría sobre las once y media de la noche. Artadi dijo que tenía que acabar de hacer unas consultas y, apenas unos minutos más tarde, volvió a contactar con Jové para comunicarle que el decreto necesario para la convocatoria se publicaría alrededor de una hora más tarde, pero con fecha del día 6, como su interlocutor había planteado. Durante los contactos citados, Artadi le comentó al exnúmero dos de Junqueras que el entonces conseller de Presidència, Jordi Turull, le había manifestado que debía ser el propio Jové quien indicara la fecha para la publicación del mencionado decreto. La Guardia Civil también alude a otra conversación de Artadi, la que sostuvo con el exsecretario de Hacienda, Lluís Salvadó, en la que se trata sobre la importancia de nuevas estructuras tributarias en Catalunya.
La Guardia Civil concluye del cruce de datos analizados –obtenidos sobre todo a partir de pinchazos telefónicos– que los tres responsables principales de la organización del 1-O fueron Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y Raül Romeva. Ahora bien, los informes subrayan el papel destacado de Jové, a quien llegan a calificar como “el cerebro de la logística” de todo el proceso.
Los informes de la Guardia Civil también hacen mención destacada de Marta Rovira, que el próximo lunes declara ante el juez Llarena. Los investigadores sostienen que Rovira no sólo despachaba con Junqueras, sino también con Jové, por ejemplo sobre la confirmación de los locales útiles para las votaciones del 1-O. La secretaria general de ERC fue imputada el pasado 22 de diciembre. Artadi, en cambio, no lo está. Fuentes de la Fiscalía dijeron ayer que estudiarán si, a raíz de los nuevos informes, es preciso pedir que sea citada para declarar como investigada.
Capítulo aparte merecen las conclusiones de la Guardia Civil sobre el papel jugado por los responsables de los Mossos d’Esquadra para favorecer el 1-O. Aquí se acusa al exdirector del cuerpo, Pere Soler, y al exmayor de la policía autonómica, Josep Lluís Trapero, de proteger a los dirigentes soberanistas con labores de “contravigilancia”. Es decir, para impedir cualquier investigación de la que estuvieran siendo objeto. Por ello sostiene que “parece meridiano que la Generalitat utiliza a su propia policía autonómica más para funciones de seguridad y protección de sus miembros, aun cuando éstos realizan acciones que pueden infringir la ley, que para hacer cumplir los mandatos judiciales o las investigaciones policiales”.
Otra conclusión es que del conjunto de sistemas operativos y precauciones adoptadas puede deducirse que los dirigentes soberanistas actuaron con métodos propios “del comportamiento de la delincuencia organizada”.
También se destaca que el expresidente Puigdemont habría recibido apoyo de los Mossos para huir a Bélgica y que “sigue disfrutando de escolta” de la policía autonómica en la capital belga. En este punto se vuelve a la agenda y los planes estratégicos de Jové y su documento EnfoCats para destacar que los planes soberanistas siempre destacaron que los Mossos eran “una estructura de Estado imprescindible”.
LA INVESTIGACIÓN
Los informes destacan la labor de Marta Rovira en la búsqueda de locales para votar
LAS ACUSACIONES
Los Mossos hicieron contravigilancias para proteger a dirigentes independentistas