Los Mossos sólo se llevaron el 1-O las urnas entregadas voluntariamente
“Nos van a hacer entrega de una urna que les quedaba por aquí. Había mucha gente. La escuela ya está cerrada. Ahora entregaremos la urna y la documentación”. Quien habla es una patrulla de los Mossos d’Esquadra que se encargó, el 1 de octubre, de cerrar la escuela Mediterránea, a las 20.24 horas. Y recibió la instrucción de llevar esa urna a las “dependencias” policiales. Es una de las pocas órdenes que constan en las grabaciones que ahora serán analizadas por el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena y por la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela para contrastar si los Mossos colaboraron en una presunta rebelión instigada por el Govern.
Según se desprende de las más de mil comunicaciones realizadas ese día a través de la emisora de los Mossos en Barcelona, a las que ha tenido acceso La Vanguardia, los agentes de la policía autonómica se encargaron de comprobar que los colegios habían cerrado. Permitieron el escrutinio y recogieron sólo las urnas que los responsables de las mesas les entregaron voluntariamente, sin requerirlas a los responsables de las mesas si se oponían a darlas o si había demasiada gente en el exterior que pudiera generar algún conflicto.
En una de las grabaciones analizadas se indica, desde la central: “Necesito saber qué escuelas están totalmente cerradas y sin actividad”. Y a partir de esa instrucción, las distintas patrullas van dando el parte de los colegios que vigilaban. “Hemos intentado llevarnos las urnas y al final no hemos podido”, explica un agente a las 21.05 horas.
Las citadas grabaciones deben aclarar la actuación de los Mossos. El entonces mayor, Josep Lluís Trapero, defiende que se actuó bajo los parámetros de proporcionalidad, dando prioridad a la seguridad de los ciudadanos. Sin embargo, el coronel de la Guardia Civil encargado de coordinar el operativo entre los tres cuerpos policiales, Diego Pérez de los Cobos, mantiene que Trapero incumplió la orden del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya de prohibir el referéndum, cerrar colegios e incautarse de las urnas. De los Cobos sostiene que actuaron más de acuerdo con los organizadores del 1-O y del Govern.
De las grabaciones de ese día se deduce también que los Mossos permitieron el escrutinio. “Nos comunican que harán el recuento y cerrarán”. “En principio el colegio está cerrado, nos informan de que están haciendo recuento de votos”, son algunas de las frases que se repiten.