¿Espriu contra Martí i Pol?
Sería interesante hacer un ranking de los poetas más citados por los políticos. Como la lista de libros más vendidos que siempre da sobresaltos sobre el estado de nuestro nivel cultural. Pongamos desde la instauración de la democracia –antes a los poetas los silenciaban o mataban–, establecer la frecuencia, la coincidencia en el tiempo, las circunstancias… Y el porqué. Analizar los porqués requeriría a un estudioso y no a un tipo de barrio como yo, que tiende a pensar que los políticos cuando vienen, o van, de mitin, nos sueltan una cita poética de proximidad como las coristas del Paral·lel con su: “Bonanitbarsalona”.
La poesía y su utilidad política. ¡Ay! En un poema el político encuentra una frase a su medida. Con la ventaja de que no la dice él, la repite y avala así su cultura y la de la élite del poder. Un político leído es más de fiar. A veces –otra vez el barrio–.
En la primera democracia Machado y Espriu eran los más referidos, a este lo entendían poco pero en sus versos encontraban los eslóganes adecuados. Y además era un emblema de la resistencia y la llama de un idioma perseguido. Y de la concordia ibérica. De lo común peninsular. Hasta que un ex, muy fulero, nos hizo saber que: “Espriu se equivocó”. Y lo descartamos. El señor Guerra, que apuntaba maneras de intelectual, citaba a Machado y escuchaba Mahler, aunque más de un malévolo de derechas decía que era para incrementar su más que probado éxito con las damas. Su compañero González habló de las Memorias de Adriano, que no era poesía pero casi, y acabó con la tinta de imprenta. Zapatero escribió de Gamoneda y lo situó en el mapa.
Y como aquí pasamos de un poeta nacional a otro, sin cohabitar, pronto le tocó a Martí i Pol, que ha sido un condensador de exaltaciones de la buena gente y de lectores que se iniciaron con su Estimada Marta. Cantado, recitado, pintado, divulgado por Guardiola, es reproducido en esquelas, leído en bodas y bautizos… Un catalizador de la euforia patria. Los políticos, como con Espriu, lo saquean a frases. ¿Enfrenta la política a estos dos grandes poetas? Puigdemont tuitea Martí i Pol y más de tres articulistas, matizadamente opuestos, reproducen un mismo fragmento espriuano: “A vegades es necessari i forçós que un home mori per un poble, pero mai no ha de morir tot un poble per un home sol”. Y las emociones se hiperventilan.