La Vanguardia

Muere en Siria un voluntario español de las milicias kurdas

- FÉLIX FLORES Dohuk (Irak). Enviado especial

Samuel Prada León, nacido en Ourense hace 24 años, murió el pasado 10 de febrero en Afrin (Siria) mientras combatía en las filas de las milicias kurdas contra el ejército turco. Las Unidades Populares de Protección o YPG emitieron ayer un comunicado en el que anunciaron la muerte del miliciano, que se hacía llamar Baran Galicia, y de un voluntario francés, Olivier François Jean Le Clainche, Kendal Breizh , en la misma jornada en el frente de Jinderise. Aunque las YPG no aclararon las circunstan­cias en que cayeron, parece probable que se tratara de un bombardeo turco. Dos días después moría en enfrentami­entos entre las YPG y el ejército sirio en la provincia de Deir Ezzor un voluntario holandés, Sjoerd Heeger, Baran Sason. Las milicias kurdas de Siria dieron cuenta de las tres muertes en el mismo y largo comunicado, en términos elogiosos y de agradecimi­ento.

La guerra contra el Estado Islámico en Siria e Irak ha atraído voluntario­s de todo el mundo, en buena medida seducidos por el carácter declaradam­ente revolucion­ario y de izquierdas de los kurdos en sus cantones del norte de Siria, conocidos en conjunto como Rojava. Así, Samuel Prada y Le Clainche se alistaron el pasado verano y, tras un mes de instrucció­n militar, participar­on en las campañas contra el Estado Islámico en Raqa y Deir Ezzor. El pasado enero, cuando el ejército turco irrumpió en el cantón kurdo de Afrin, en el oeste de Siria, decidieron permanecer en las filas de las YPG.

La campaña turca de Afrin, que cuenta con el apoyo de milicias sirias de oposición al régimen, buena parte de ellas de corte islamista, cumple hoy un mes y podría tener un rápido final, no por inesperado menos lógico.

Fuentes de las YPG confirmaro­n ayer tarde que tropas sirias entrarán en Afrin en cuestión de un par de días y “asegurarán las fronteras”. En cuanto se produjo la invasión turca, los kurdos hicieron esta petición a Damasco, que no empezó a tener respuesta hasta esta semana. Las negociacio­nes no están sin embargo concluidas, señalaban anoche. De este modo, el ejército turco no necesitará seguir intentando avanzar. Los progresos turcos en un mes han sido magros, y en los dos últimos días sus fuerzas no han registrado gran actividad, aparenteme­nte a la espera de cómo iban las negociacio­nes entre Damasco y los kurdos, aunque un comunicado de las YPG señalaba ayer que “en la tarde del sábado y hasta la madrugada del domingo las cercanías de la ciudad de Afrin fueron bombardead­as con armas y aviones”.

La aspiración de Turquía –ya desde el inicio de la guerra siria hace siete años– es abrir una zona tampón al sur de su frontera con Siria libre de la presencia kurda, con lo que el citado acuerdo, según como se materialic­e, le beneficiar­ía.

Acuerdo entre los kurdos y Damasco para que tropas sirias entren en el cantón de Afrin, atacado por Turquía

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