El barrio de Lavapiés vuelve a la tranquilidad tras los graves disturbios
La tranquilidad volvió al barrio madrileño de Lavapiés, donde el jueves y el viernes se registraron graves enfrentamientos entre los vecinos y la policía a raíz de la muerte de un ciudadano senegalés de 34 años. Ayer, la plaza Nelson Mandela, centro neurálgico de las protestas, así como de la manifestación pacífica celebrada el viernes por la noche, despertó como otro sábado cualquiera. “Los disturbios del jueves no tienen explicación”, señala Alberto Bellido, un vecino de 50 años, quien cree que el bulo que se extendió por las redes y que apuntaban a que Mame Mbayi había muerto de un paro mientras huía de la policía encendió una mecha que “siempre está latente” en el barrio multicultural por excelencia de Madrid (casi el 25% de sus habitantes son extranjeros).
Las declaraciones de los responsables del Ayuntamiento que dirige Manuela Carmena, por un lado, y la de los vecinos de la calle del Oso, donde murió el senegalés, por otro, y que indicaban que Mame Mbayi había muerto de un paro cardiaco en la calle sin que fuera perseguido por nadie, ayudaron a calmar los ánimos.
Pero ¿quién lanzó el bulo que dio paso a los graves enfrentamientos del jueves y del viernes? Nadie lo sabe con exactitud, como casi todo lo que rodea a internet. Hay quienes apuntan a grupos de extrema izquierda, siempre dispuestos a señalar a la policía.