El soberanismo sella un frente común contra “la represión”
Independentistas y comunes recuperan la unidad en favor de los “presos políticos”
El soberanismo recuperó ayer, después de mucho tiempo, un mínimo escenario de unidad a cuenta de la defensa de los “presos políticos”. Independentistas y comunes aprovecharon la segunda votación de investidura en el Parlament, reconvertida en un pleno de recuerdo de los dirigentes encarcelados por el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, para cerrar filas y apelar a la formalización de un “frente democrático común” ante “la represión judicial” del Estado. Una idea que, cada uno con sus matices, secundaron Junts per Catalunya (JxCat), ERC y la CUP, por un lado, y Catalunya en Comú, por otro, que conjuntamente dedicaron un largo aplauso a los familiares de los presos presentes en el hemiciclo.
En este sentido, no sólo el bloque independentista consiguió restablecer la cohesión, ni que sea momentáneamente, perdida por las diferencias sobre la formación de Govern, sino que sus planteamientos en defensa de “la libertad y la democracia” fueron coincidentes con los de los comunes. JxCat, de acuerdo con ello, defendió que el proceso in-
dependentista había puesto en cuestión la “restauración monárquica de 1975” y había provocado que “el sistema quebrara”, dando paso a una situación en la que “en estos momentos está juego la libertad y la democracia” y frente a la que Joaquim Torra apostó porque “todos los demócratas” cierren filas. La idea del frente común la recogió
asimismo el PDECat –integrante de JxCat– en el consejo nacional que celebró posteriormente.
Más contundente incluso si cabe se mostró ERC, al dar por hecho que “la democracia en España ha quedado definitivamente suspendida, y no hay lugar para la equidistancia”, y al considerar que “los demócratas españoles tienen que decir basta, porque los siguientes serán ellos”, y revelarse contra los que “quieren preservar una monarquía corrupta”. Una dura reflexión que corrió a cargo de Sergi Sabrià, que precisamente, después de la reestructuración de la cúpula del partido con el ascenso de Pere Aragonès a la presidencia adjunta y el desplazamiento de Marta Rovira a Suiza, dejará de ser el portavoz de la formación –le relevará la exdiputada Marta Vilalta– para dedicarse de lleno al grupo en el Parlament.
La CUP, por su parte, tampoco se anduvo por las ramas y proclamó la necesidad de constituir, en su caso, un “frente republicano” ante la “suspensión de la democracia” en España. “Apostamos por la estrategia republicana, de no echarnos atrás, de todas las fuerzas democráticas contra la represión”, subrayó Natàlia Sànchez, que situó el funcionamiento de este “frente amplio” sobre todo en la movilización en la calle y que fue la única diputada de todos los intervinientes que acusó directamente al juez Llarena no sólo de “confundir la democracia con la unidad de España”, sino de prevaricar. “Se creen que son el último muro de la democracia, cuando lo que son es el ariete de su demolición”, advirtió.
El “frente amplio” fue la opción por la que también abogó Catalunya en Comú. “Necesitamos una respuesta lo más amplia y transversal posible en las horas más oscuras de nuestra historia”, recomendó Xavier Domènech, para quien “la causa de la democracia tiene que interpelarnos a todos” y “el frente democrático es la única posibilidad para salir de la situación”. Un “frente democrático”, político y social, que entiende que debería abarcar desde la CUP al PSC y desde Òmnium Cultural a CC.OO., porque “hay una causa que va más allá de cada uno”. El dirigente de Catalunya en Comú, en todo caso, vinculó indirectamente esta unidad de acción a una gran alianza de gobierno, en caso de que el independentismo no sea capaz de acabar formando Govern, que dejó sobre la mesa y que ni mucho menos pasó desapercibida. Como muestra, la intervención de Domènech fue acogida con aplausos desde los escaños de ERC.
Y la escenificación de la unidad concluyó con una imagen no menos significativa que las palabras oídas en el hemiciclo: un representante de cada una de las formaciones al lado del presidente del Parlament, Roger Torrent, mientras leía la declaración en defensa de los principios democráticos y los derechos civiles y políticos en el auditorio.
JOAQUIM TORRA JXCAT “Conjurémonos para persistir y para ganar, porque sólo así los presos políticos y los exiliados volverán a ocupar los escaños que, como nosotros, ya les echan de menos”
SERGI SABRIÀ ERC “La democracia en España ha quedado definitivamente suspendida. Catalunya ha dicho basta: hay que escoger o el Estado o la democracia”
X. DOMÈNECH CATCOMU “Hay una causa que va más allá de cada uno. La causa de la democracia es la que nos debe reunir a todos desde una grandísima generosidad”
JxCat, ERC y CUP restablecen la cohesión perdida por las diferencias sobre la formación de Govern
NATÀLIA SÀNCHEZ CUP “Su oferta es la prisión, el exilio, los porrazos, los abusos de poder. Hay que ser muy inútil para creer que de esta manera se solucionará algo”