El PP pide a Colau que compre el solar de Agbar de Sagrada Família
El grupo municipal del PP en Barcelona reclamó ayer al equipo de gobierno que expropie el solar propiedad de Aguas de Barcelona (Agbar) en la calle Mallorca para destinarlo a realojar a los vecinos afectados por la ampliación de la Sagrada Família. Hace un mes, el Ayuntamiento de Barcelona decretó una suspensión de licencias en siete solares del Eixample con la intención de estudiar su posible uso como equipamientos. Tras meses de análisis, el equipo de gobierno decidió descartar dos de estos terrenos. Uno de los solares desafectados es el de Agbar, que está situado en la calle Mallorca 424-432 y que acoge una antiguo almacén.
Se trata de una pieza clave en la futura transformación de la Sagrada Família que permitiría la construcción del paseo y el puente que nace de la fachada de la Glòria y pasa por encima de la calle Mallorca, según diseñó Gaudí. De hecho, y así se había discutido con los responsables del templo y anteriores alcaldes, se había decidido destinar este solar, que está muy próximo al templo, a alojar a los vecinos afectados por la ordenación y urbanización de los entornos del templo.
El líder del PP, Alberto Fernández, criticó ayer que el Ayuntamiento descarte la adquisición de este espacio, con un valor estimado de 23 millones de euros, y reclamó su compra para acelerar la transformación del entorno. Considera que el terreno, además de realojar a los vecinos afectados, también podría destinarse a equipamientos y pisos sociales que son muy necesarios en el barrio de la Sagrada Família. Por eso, el grupo popular ha presentado alegaciones al Plan Especial Urbanístico para la regulación de suelos de equipamientos en el Eixample, aprobado el pasado 8 de febrero por el gobierno municipal.
El PP solicita incluir los mencionados terrenos para las posibles expropiaciones por la ampliación de la Sagrada Família, que básicamente se trataría del bloque de viviendas de Núñez y Navarro que están frente al templo y está afectado desde hace 42 años por el Plan General Metropolitano (PGM).
La intervención urbanística que afecta a los entornos cogió velocidad durante el mandato de Xavier Trias, que mantuvo un intenso diálogo con los responsables del templo para que sufragarán la expropiación de los antiguos almacenes de Agbar. Pero esta operación quedó paralizada con la llegada de los comunes al Ayuntamiento. El actual gobierno municipal considera que la urbanización del entorno del templo no es una prioridad para ellos y tampoco lo es para la ciudad.
En paralelo, el equipo de gobierno continúa en conversaciones con el Patronat de la Sagrada Família, en el marco de la comisión técnica, para redactar el plan especial que dé cobertura a la construcción del templo. Estos trabajos están relacionados con la petición de la licencia de obras que el Ayuntamiento solicitó al templo, ya que consideraba que estaba trabajando sin permisos. Una situación rechazada por los responsables de la basílica, que explican que en el momento de iniciar su construcción se solicitó la licencia al entonces Ayuntamiento de Sant Martí de Provençals.
El equipo de gobierno trabaja con los responsables del templo en la redacción de un plan especial