Vanguardias en València
El IVAM analiza la aportación de uno de los creadores del constructivismo ruso a la fotografía y al diseño
El IVAM analiza en profundidad las aportaciones del artista ruso Alexánder Ródchenko en los campos de la fotografía y el diseño, con más de cien obras entre libros, fotos y revistas de la época.
Alexander Ródchenko (1891-1956) fue un revolucionario, en muchos sentidos. Como ciudadano ruso, se alineó con los bolcheviques para transformar su país. Como artista, polifacético, abrazó el constructivismo y fue capaz de ofrecer una mirada innovadora y revolucionaria, especialmente en el campo de la fotografía y el diseño; con una concepción radical del espacio y de las técnicas del fotomontaje.
Fue tal su aportación que el director del IVAM, José Miguel Cortés, valora que “hoy no veríamos las cosas como las vemos y la forma de entender el mundo sin el arte de Ródchenko; por su captación del espacio diferente”. Lo que justifica, a juicio de Cortés, que el museo valenciano haya decidido ofrecer sus salas para analizar en profundidad las aportaciones de Ródchenko en los campos de la fotografía y el diseño, con más de cien piezas entre libros, fotos y revistas de la época. Todas proceden de la colección del IVAM, de la Biblioteca del MNCARS y del Archivo Lafuente de Santander. Se trata, además, de dos ofertas interconectadas: la exposición Caso de estudio. Ródchenko y la muestra documental Un futuro en construcción. El libro soviético. Los comisarios, Joan Ramon Escrivà e Irene Bonilla, lo han organizado a través de “capítulos”.
El primero arranca con la portada que Ródchenko diseñó para el libro Pro eto, un poema de Mayakovsky, que se convirtió en la primera obra de poesía de la historia ilustrada con la técnica del fotomontaje.
“Ródchenko (San Petersburgo, 1881 - Moscú, 1956) es uno de los creadores del constructivismo, un movimiento que se constituyó el 18 de marzo de 1921 con la participación de un colectivo de artistas que decidieron abandonar la pintura de caballete para iniciarse en la creación de un nuevo tipo de arte”, subraya el comisario Joan Ramón Escrivà. A continuación se exhiben “las emblemáticas fotografías” de Ródchenko en las que se plasma una nueva “forma de entender el mundo” gracias a sus investigaciones espaciales como sus famosas instantáneas en escorzo o sus conocidas imágenes de edificios en picado y contrapicado. El radicalismo de los encuadres de estas fotografías incluso le granjearon “ataques” de sus propios compañeros de vanguardia que le causaron una depresión.
También se incluye un apartado relevante dedicado a la revista propagandística URSS en construcción impulsada por Stalin y en la que participó Ródchenko diseñando varios ejemplares. “Stalin inició una purga de los representantes de las corrientes vanguardistas, lo que obligó a Ródckenko y a otros artistas a adaptarse, evolucionando desde una fotografía experimental hacia una práctica de fotografía documental o fotoreportaje”, según los comisarios.
Este proceso de adaptación se plasma en un gran panel con 18 ejemplares que Ródchenko y su mujer, la artista Varvara Stepánoca, diseñaron para URSS en construcción; revista en la que se publicitaban los logros quinquenales frente a la crisis del mundo occidental tras el crack del 29.
En ellas se observa cómo su fotografía había evolucionado a la práctica de la fotografía documental y al fotoreportaje al servicio del régimen estalinista pero que aún conservan recursos propios de la composición de vanguardias.
La exposición también incluye la colección de la revista LEF cuyas portadas fueron diseñadas por Ródchenko y en las que publicó sus ensayos sobre la fotografía de vanguardia, así como los carteles de la Historia del Partido Comunista “que realizó utilizando la técnica del fotomontaje, una innovación fundamental en la cartelería de la época”.
La muestra documental Un futuro en construcción. El libro soviético en el IVAM complementa la exposición en la sala de la Biblioteca con una selección de cincuenta joyas del diseño soviético de la Colección del IVAM realizadas por artistas como El Lisitski, Gustav Klucis, los hermanos Vladímir y Geórgui Sténberg, Kasimir Malevich, Solomon Telingater, o por mujeres clave en el desarrollo de la vanguardia rusa como Natalia Goncharova, Várvara Stepánova, Natalia Pinus, Valentina Kulagina o Liubov Popova.
“La muestra se centra en las publicaciones de los años veinte y principios de los treinta, época de esplendor de la vanguardia constructivista”, según la comisaria Irene Bonilla, con unas publicaciones que “propiciaron una auténtica revolución en la manera de entender el libro”. “Los libros no son solo para leer sino para ver y se presentan como una estrategia más de transformación”, añade. Las muestras se podrán ver hasta el 26 de agosto.
El centro reúne más de cien piezas, entre libros, fotos y revistas de la época, para abordar al artista ruso