¿La deuda? Muy bien, gracias
Una de las consecuencias de los bajísimos tipos de interés en la zona euro ha sido perpetuar el acceso al crédito a coste muy bajo a los estados, las empresas y las familias. En especial, a los primeros, que se benefician de tipos muy bajos cada vez que tienen que acudir al mercado con una nueva subasta de bonos. La deuda alemana a diez años cerró el jueves con una rentabilidad del 0,496% después de experimentar la mayor caída mensual desde el pasado agosto. Los bonos franceses y alemanes también vivieron un gran mes de marzo, con descensos de sus retornos para los inversores de alrededor de 20 puntos, sólo superados por la caída en la rentabilidad de los bonos españoles y portugueses, con 30 puntos.
El Tesoro español se financia a un coste históricamente bajo. Los bonos españoles a diez años concluyeron el viernes en el 1,16%, su nivel más bajo desde octubre del 2016. La prima de riesgo –que mide la diferencia de rentabilidad de sus bonos con los de Alemania–está en los 66,6 puntos básicos. “Hay una gran convergencia con otros grandes países de la eurozona y España en estos momentos”, asegura a Bloomberg Lyn Graham Taylor, estratega de renta fija de Rabobank. “A la gente le gusta la historia de crecimiento y está contenta de ver más allá de la tensión con Catalunya”, añade.