La Vanguardia

Más problemas en Tesla

El conductor puso el ‘autopilot’ y soltó el volante antes del choque

- ÓSCAR MUÑOZ

La firma de Elon Musk sufrió la semana pasada un accidente mortal cuando el conductor de uno de sus vehículos activó el modo automático. La empresa acumula problemas, y sus acciones caen en bolsa.

Semana Santa nefasta para Tesla. La icónica firma de Elon Musk, fabricante de automóvile­s de alta gama cien por cien eléctricos, vive estos días su particular vía crucis, tras sufrir un Model X equipado con un sistema de conducción semiautóno­ma un accidente mortal, el segundo protagoniz­ado por un vehículo de esta marca con este tipo de mecanismo. El primero ocurrió en el 2016. La noticia se produce pocos días después de que un coche de Uber, en este caso un Volvo XC90, que realizaba pruebas en modo autónomo, atropellas­e a una mujer, que falleció. Ambos sucesos han reavivado el debate sobre la seguridad de estos sistemas, a los que las principale­s firmas del sector están dedicando fuertes inversione­s.

Tesla confirmó el viernes a última hora por medio de un comunicado que el coche siniestrad­o, el viernes anterior en una carretera próxima a Mountain View, en el estado norteameri­cano de California, llevaba el autopilot activado momentos antes del fatal suceso. Este sistema permite mantener una velocidad y una separación de seguridad con los vehículos que circulan por delante predefinid­as. Ambas magnitudes se adaptan automática­mente según la posición de los coches para evitar colisiones. El conductor, que murió a resultas del siniestro, había soltado el volante, algo que no debía haber hecho puesto que, recordó la compañía, este mecanismo es una ayuda a la conducción y en ningún caso sustituye al humano. No obstante, la firma no explicó por qué el Model X accidentad­o no frenó y acabó empotrándo­se en la mediana de separación de la carretera. Acto seguido, recibió el impacto de otros dos vehículos y se incendió.

A la espera de conocer el resultado de la investigac­ión que lleva a cabo el Consejo Nacional de Seguridad del Transporte (National Transporta­tion Safety Board, NTSB), Tesla explicó en su comunicado que “en los momentos previos a la colisión, el piloto automático estaba activado”. No obstante, precisó, “el conductor había recibido varias advertenci­as prácticas visuales y audibles antes en la unidad y sus manos no se detectaron en el volante seis segundos antes de la colisión”. Además, añadió, “contaba con unos cinco segundos y 150 metros de visibilida­d antes de chocar, pero los registros del vehículo muestran que no se llevó a cabo ninguna acción por parte del conductor”. La gravedad del siniestro se acentuó, según la compañía, debido a que con anteriorid­ad en ese mismo punto se había producido otro siniestro que había dañado la protección de la carretera, que no había sido reparada. “Nunca hemos visto este nivel de daño en un Modelo X en otros accidentes”, aseguró la firma de Elon Musk.

Ante la falta de detalles sobre el accidente, Tesla sufrió esta semana varias jornadas de fuertes caídas en la bolsa. El martes y el miércoles fueron muy pronunciad­as situándola en mínimos anuales. La semana se cerró con un cierta recuperaci­ón. El comunicado de la compañía sobre el accidente mortal se hizo público con los mercados ya cerrados. Este comportami­ento en el parquet se produjo tras rebajar Moody’s la calificaci­ón de la firma a B3, seis niveles dentro del bono basura y con perspectiv­a negativa. La principal razón son las dudas que plantea la baja producción del Model 3, el coche con el que pretende llegar a públicos masivos gracias a su precio, a partir de 35.000 dólares. En el último trimestre del 2017 se fabricaron sólo 2.425 unidades, cuando las previsione­s iniciales se situaban en 5.000 a la semana para finalizar el 2018 con 10.000. Ahora, el plan es alcanzar en breve las 2.500 y acabar junio en las 5.000.

A los contratiem­pos en la producción se suman las presiones que tiene Tesla por falta de liquidez al disponer un flujo de caja negativo y vencer pronto bonos por valor de 230 millones de dólares el próximo noviembre y de 920 millones en marzo del 2019. Y si todo esto no fuera suficiente, la compañía acaba de llamar a revisión 123.000 unidades Model S, las fabricadas antes de abril del 2016, tras haberse detectado un problema en la dirección asistida que, ha asegurado, no ha provocado hasta la fecha ningún accidente.

Varios contratiem­pos técnicos, productivo­s y financiero­s presionan a la firma de Elon Musk

 ?? AP ?? Estado en el que quedó el Model X siniestrad­o el viernes 23 cerca de Mountain View (California)
AP Estado en el que quedó el Model X siniestrad­o el viernes 23 cerca de Mountain View (California)

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain