Telefónica inicia la salida a bolsa de su filial argentina
El grupo Telefónica ha iniciado los trámites para sacar a bolsa su filial argentina, en una operación que le permitiría continuar su estrategia de reducir deuda y conseguir fondos para reforzar las inversiones en el país para extender su red de fibra óptica.
Telefónica Argentina comunicó a la Comisión Nacional de Valores (CNV) de ese país la convocatoria de una asamblea ordinaria y extraordinaria para el próximo 16 de abril en la que se pedirá a los accionistas que autoricen al consejo de administración para lanzar una oferta pública de acciones en las bolsas y mercados. En la convocatoria, avanzada por la agencia Reuters, se pide a la asamblea que autorice también al consejo a modificar los estatutos de Telefónica Argentina, y a cambiar el valor nominal de la acción. La autorización de los accionistas es necesaria para que el grupo, que controla el 100% de la operadora argentina, tenga las manos libres para sacarla a cotizar cuando considere que las circunstancias bursátiles sean favorables.
Portavoces de Telefónica se limitaron a señalar que “Telefónica está analizando distintas opciones para poner en valor su cartera de activos, entre las que se encuentra Telefónica Argentina”.
La filial, que opera con la marca Movistar, cuenta con más de 25 millones de clientes y en el 2017 aportó al grupo 3.495 millones en ingresos y 971 millones de euros de beneficio operativo o ebitda. La operadora supone así un 6,7% de los ingresos y un 6% del ebitda del grupo, y crece además a tasas de doble dígito, impulsada por la recuperación económica del país. Según analistas de Barclays, la compañía podría tener un valor neto de 4.667 millones de euros.
El presidente ejecutivo de Telefónica, José María ÁlvarezPallete, ya explicó en la presentación de resultados del 2017 que la firma estaba estudiando cómo poner en valor algunos de sus activos “infravalorados”, especialmente en América Latina. La operadora ya estudió la salida a bolsa de Telefónica Argentina a finales del año pasado, así como otras posibles operaciones de venta directa o colocaciones de participaciones minoritarias en sus operadoras de Colombia y México. Fuera de Latinoamérica, la firma ha analizado también opciones para su filial alemana y sigue trabajando en la salida a bolsa de su filial británica, O2. Esta operación, planteada tras fracasar la venta a Hutchison Whampoa por el veto de las autoridades de Competencia, está ahora pendiente del resultado de la subasta de espectro para móvil 4G y 5G, que está en marcha en estos momentos en el Reino Unido.
Telefónica lleva dos años centrada en reducir deuda. El grupo cerró el 2017 con una deuda neta financiera de 44.230 millones de euros tras reducirla en 2.992 millones en el cuarto trimestre, especialmente por la generación de caja libre del propio negocio(1.721 millones), la venta del 40% de Telxius (1.275 millones) y la emisión de instrumentos de capital (915 millones).
La firma estudia más operaciones en Latinoamérica, donde ve sus activos infravalorados