Inseguridad en El Prat
Prosegur, Securitas y Eulen renuncian y los trabajadores temen nuevos conflictos
La licitación del nuevo contrato de seguridad para el aeropuerto de la capital catalana, que estipula mejores condiciones para los trabajadores, amenaza con reactivar la conflictividad laboral del pasado verano.
Trabajadores del aeropuerto de El Prat han advertido que el nuevo contrato de seguridad, abierto a concurso público por Aena, puede volver a provocar conflictos a las terminales como los del verano pasado. A través de un comunicado, explican que las condiciones del contrato fijadas por el acuerdo de noviembre pasado entre los sindicatos, la patronal y el Gobierno español han desincentivado las principales empresas del sector a presentarse. Así, Prosegur, Securitas y Eulen han renunciado al contrato porque “no les salen los números”. Viendo los nuevos pluses salariales a los vigilantes de seguridad y el aumento de posibles sanciones, las tres empresas habrían decidido no contribuir a la licitación. Para el asesor del comité de huelga de Eulen, Juan Carlos Giménez, eso abre las puertas a nuevas empresas “de menos capacidad” que pagan “mal y tarde”, hecho que podría traer nuevos conflictos laborales.
El comunicado plantea que las empresas pretenden reducir los sueldos de los vigilantes para obtener beneficios, pero que ahora se encuentran maniatadas por las nuevas condiciones del acuerdo. Ante la posibilidad de nuevos conflictos, el asesor del comité de huelga prevé que Aena se desvinculará y dirá que “es un conflicto entre empresa y trabajadores”. Giménez asegura que el problema de las licitaciones “es ya demasiado conocido y repetitivo en los diferentes sectores que trabajan para Aena”. “Parece que el modelo de precariedad ya les va bien”, lanza al final del comunicado.
En diciembre pasado, Aena sacó a concurso el servicio de seguridad privada al aeropuerto de El Prat de cara al 2018 por un importe de 41.426.514,60 euros. Esta cifra aumentó en 17,8 millones con respecto al importe de la última licitación del 2016, que fue de 23.635.968 euros. El servicio de seguridad, adjudicado entonces a la empresa Eulen, finaliza este mes de junio. Hoy por hoy, es un interrogante qué pasará a partir de entonces.