El PDECat insiste en que la prioridad es la formación de Govern
Más allá del nuevo intento de investidura de Jordi Sànchez, que por supuesto respalda, la prioridad del PDECat continúa siendo formar Govern. Y así se constató durante la reunión que mantuvo ayer la dirección ejecutiva del partido, en la que se analizó el momento en que se encuentra el proceso de elección del presidente de la Generalitat y los pasos que seguir a partir de ahora.
A partir de la convicción, aunque en público no se reconozca, de que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena volverá a impedir la investidura del número dos de Junts per Catalunya (JxCat) y de que esta posibilidad de elección es, por tanto, una manera de “ponerle en evidencia” después de las medidas cautelares del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la cúpula del PDECat se mantiene inflexible en su posición de poder disponer de un presidente efectivo cuanto antes y, a partir de aquí, formar Govern. En este sentido, una vez quede finalmente descartada la opción del expresidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), y aunque Jordi Turull también acudirá a la ONU para solicitar las mismas medidas cautelares en defensa de sus derechos políticos, la intención de la dirección del partido es impulsar un candidato que sea el definitivo, es decir, el llamado plan D. Una idea que no pasa precisamente por volver a intentar la investidura de Carles Puigdemont, como reclaman algunos sectores del bloque independentista, sino por buscar un cuarto nombre, como el de la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, que es quien en las últimos días ha ganado enteros para ocupar el puesto. Oficialmente, sin embargo, el PDECat rehúye dar por descartado al presidente de la Generalitat destituido por la aplicación del artículo 155 de la Constitución, y su portavoz, Maria Senserrich, se limitó, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la dirección ejecutiva, a precisar que “ahora estamos en la etapa de Jordi Sànchez” y que de momento “no hay alternativa encima de la mesa”.
Mientras, en todo caso, la cúpula del partido se ha sumado a la petición de diálogo con el Gobierno español que el propio Carles Puigdemont reiteró el viernes nada más salir de la cárcel de Neumünster y a pesar de que durante el fin de semana Mariano Rajoy ya la ha rechazado de plano.