Los grandes proyectos de Colau quedan en suspenso
El pleno de hoy evidenciará de nuevo la falta de aliados del gobierno de los comunes
El pleno extraordinario de hoy evidenciará las dificultades del gobierno de la alcaldesa Ada Colau para sacar adelante sus grandes proyectos, marcar diferencias con sus predecesores y hacer realidad todas las promesas electorales que le condujeron a la alcaldía. La idea de unir las dos líneas del tranvía por la Diagonal sufrirá un duro varapalo: los comunes dificilmente encontrarán los apoyos que necesitan para desarrollar su proyecto estrella de infraestructuras. El horizonte de la multiconsulta parece cada vez más lejos y difuso. Arrastra una maraña judicial y lo que se suponía que marcaría un punto de inflexión en la historia de la participación ciudadana no tiene ni un calendario claro.
Hasta última hora de ayer, varios miembros del gobierno municipal estuvieron intentado por teléfono evitar el desastre: que los comunes no se queden hoy solos en las votaciones. Aunque estos no fueron los únicos movimientos de una larga jornada en la que se evidenció la distancia entre el equipo del gobierno y el resto de formaciones.
En el caso del tranvía, la alcaldesa Colau y su teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, acompañadas de representantes municipales de otras ocho poblaciones, trataron de redoblar su presión sobre los concejales de ERC, de convencerles de que cambien de parecer y apoyen su propuesta de ampliación del Trambesòs hasta el paseo de
Sant Joan.
Las dos políticas se embarcaron en un reivindicativo viaje organizado por la plataforma ciudadana Unim els tranvies. “El pleno del Ayuntamiento hace el boicot a un proyecto que reduciría la contami- nación”, lamentó un portavoz de la plataforma. Después Colau pidió a los republicanos que pongan los intereses de la ciudad por encima de las siglas políticas, y les recordó que la unión de las líneas también figuraba en su programa electoral.
Pero al poco de que Colau y Sanz se bajaran del tranvía, los ediles de ERC dejaron claro que su postura es la misma, que no están dispuestos a apoyar una inversión pública tan importante cuyos beneficios reviertan principalmente en los operadores privados a cargo de las líneas, y no en la mejora de la red del transporte público. ERC apoya la ampliación del tranvía, pero no a cualquier precio. Así lo explicaron otra vez en un comunicado conjunto los concejales republicanos de nueve municipios metropolitanos. Hace pocas semanas Colau aprovechó la extraordinaria situación política que atraviesa Catalunya para interrumpir el último pleno ordinario y luego suspenderlo. De este modo se ahorró un debate que tenía perdido de antemano. Hoy la situación es la misma, si cabe un poco más arisca. La verdad es que estas semanas los comunes se dedicaron básicamente a escribir tuits en los que culpaban a los republicanos del fracaso del tranvía. Hoy los tendrán cara a cara en el pleno.
Y la multiconsulta podría llegar al pleno únicamente con las dos preguntas de iniciativa ciudadana: la que hace referencia a la municipalización del agua y la del cambio de nombre de la plaza de Antonio López y López.
Fuentes municipales reconocieron la posibilidad de retirar las dos propuestas del gobierno de Colau
ACCIÓN
El gobierno municipal presiona a ERC en un viaje reivindicativo en el Trambesòs
REACCIÓN
Los republicanos no se arrugan y mantienen su rechazo a la unión por la Diagonal
sobre el futuro del solar vecino del hotel de Rec Comtal y la posibilidad de construir viviendas en el 22@. Las dos preguntas necesitarían obtener el apoyo de 27 de los 41 concejales que hay en el pleno. Pero los comunes son 11 y tan sólo tienen asegurado el apoyo de los cinco de ERC y en la primera pregunta. La mayoría de grupos de la oposición no ven claro que se gaste entre 2,5 o 5 millones de euros –no hay una cifra oficial– en una consulta que, la mayoría, ven más política y efectiva y cuyo desarrollo se ve turbio.
Hay dudas sobre la fecha: siempre se ha dicho que se celebraría antes del verano, pero el hecho de que el Consistorio asumiera parte de la logística después que el Tribunal Catalán de Contratos del Sector Público decidiera, en enero, suspender el procedimiento de contratación de la logística tras un recurso presentado por la empresa 3CS, hace temer, incluso internamente, que no se puedan cumplir los plazos. También hay que tener en cuenta que el acuerdo para celebrar la consulta se tiene que adoptar en los seis meses anteriores a las elecciones locales. Y lo que se somete en el pleno de hoy es tan sólo la aprobación de las preguntas de la consulta.
Aunque quizás lo que genera mayor incertidumbre es la maraña judicial a la que ya se enfrenta, que podría dejar en el aire todo el proceso, incluso después de celebrarse.
Y es que la multiconsulta ya colecciona diez recursos judiciales, interpuestos en los últimos meses por diferentes actores, aunque el gobierno municipal ve una única mano: la de Agbar, y una única causa, la municipalización del agua.
El Consistorio recibió el último recurso ayer mismo, en este caso en forma de denuncia por prevaricación y malversación contra Colau por paralizar la contratación del concurso de logística. Lo presentó la empresa 3CS, la misma que interpuso recurso contra los pliegos del contrato de servicios de producción y logística. Detrás de los otros recursos están Abogados Catalanes por la Constitución, la Delegación de Gobierno en Catalunya, la Cámara de concesionarios y empresas vinculadas al Sector Público, Agbar, la Sociedad General de Aguas y la Asociación para la Transparencia y la Calidad Democrática.
Una maraña que estará muy presente en el pleno, también porque, según algunos miembros del gobierno municipal, al tratarse de dos preguntas motivadas por la participación ciudad, interpretan que ningún grupo podrá votar en contra, dado que el informe jurídico municipal señala que sólo se podrá denegar “si no se adecua al ordenamiento jurídico”. Y a su juicio se adecua... Aunque no según algunos partidos de la oposición.
Entre tanto, la propuesta ciudadana cuyas firmas no fueron validadas por el Ayuntamiento porque algunos de sus fedatarios encargados olvidaron firmar los reversos de los impresos, la que propone que sobre el gimnasio Sant Pau del barrio del Raval se construyan viviendas sociales, trata de encontrar apoyos entre los grupos políticos para poder salir adelante al margen de la multiconsulta. Sus responsables explicaron ayer que las conversaciones con el PDECat, ERC, Ciudadanos, PSC y la CUP avanzan de un modo satisfactorio, que confían en que los grupos planteen en el pleno del mes de mayo que el Ayuntamiento compre la finca para que su iniciativa salga adelante.
INCERTIDUMBRE
La maraña judicial puede dejar en el aire el proceso participativo aunque se celebrara