Dependientes en energía
El consumo de energía primaria y final en España aumentó de nuevo en 2016 y la dependencia energética del país sigue en valores muy altos. Estas son las conclusiones del Informe 2017 del Observatorio de Energía y Sostenibilidad, elaborado por la Cátedra BP de Energía y Sostenibilidad de la Universidad Pontificia Comillas ICAI-ICADE.
Según el estudio, el sector energético español consumió 6,3 exajulios (EJ) de energía primaria y emitió 306 millones de toneladas (Mt) de CO2.
El mismo informe indica que la intensidad energética primaria cayó un 2,9% pese al aumento de la demanda. Una mejoría que se produjo gracias a la reducción del uso del carbón de más de un 24% en favor de la energía hidráulica. El mismo informe considera necesario apostar por una mayor contribución de las energías renovables y, sobre todo, por el ahorro y la eficiencia energética. Además, recuerda que pese a mejorar en el último año, España sigue presentando una intensidad energética muy superior a otros países de nuestro entorno. Excepto el carbón, todas las energías fósiles aumentaron su contribución al ‘mix’ energético primario en el año 2016. Por su parte, las energías renovables en su conjunto mantuvieron una contribución similar a la del año anterior.
Este sector del transporte consumió más del 41% de la energía final y contribuyó con un 28% a las emisiones del CO2. El transporte por carretera continúa representando en torno al 90% del total.