“No me llames Dolores”
Dolo Beltrán, cantante y actriz, actúa en el Festival del Mil·lenni
La cantante y actriz Dolo Beltran, integrante junto a los hermanos Pauet y Caïm Riba del grupo Pastora, actúa en el escenario de El Molino, donde presenta su primer disco en solitario, Copilotos dentro del Festival Mil·lenni.
Dolo Beltrán es conocida en el ámbito musical sobre todo por haber sido durante más de diez años la vocalista del grupo Pastora, tarea que compaginaba con destacados papeles en cine, teatro y televisión. Aquel proyecto entró en punto muerto y el año pasado, tras diversos retrasos y el nacimiento de su hijo, alumbró Copilotos, su primer disco en solitario y repleto de canciones muy bailables. Este viernes lo desgranará en El Molino dentro del Festival del Mil·lenni (21 h).
Sorprendió que su primera obra sea tan bailable, pero escuchándola ahora meses después de su publicación ¿qué le parece?
Estoy muy contenta. Hay muchos temas que tienen estructura muy pop, y aunque tengan un bum bum muy sintetizado, no dejan de ser pop. Luego Copilotos en directo se convierte en algo muy bailable pero también tiene cosas simplemente para escuchar y disfrutar. Y tengo la suerte de que en vivo tengo una banda que me acompaña espléndida, con Jordi Busquets que hace cosas increíbles.
¿Qué cree que transmite este álbum? ¿quién hay detrás de él?
Ganas de vivir, de moverme. Recuerdo que el parón de Pastora me pilló en un momento en que no me apetecía hacerlo y entré en un periodo de mucha tristeza, pero después de estar tres meses mal me dije que quería seguir bailando, volver a estar encima del escenario. Y de allí sale Copilotos. Y lo titulé así porque como me hubiera sido imposible hacerlo sola, lo dediqué a todos los que lo hicieron posible, comenzando por mi hijo.
¿Una especie de homenaje a la vida?
Mis canciones, más bien, reflejan ganas de bailar la vida. Es que entre cumplir los 40 años –ahora tengo 43–, que no me sentaron muy bien y el parón musical me vi en la necesidad de reinventarme. Pero ahora ha pasado ya tiempo desde que concebí este disco, y la verdad es que ahora mismo haría uno de otro tipo, con más texturas electrónicas, con un directo que fuese más espectáculo que concierto y con apenas músicos.
Fuera del ámbito musical, ¿qué ha hecho en los últimos tiempos?
Pues ser madre, conciertos en formato íntimo y con grupo como este de El Molino, doy clases de canto y teatro. Al teatro no he vuelto desde que hice El test durante 2016 y 2017 con mucho éxito. Paré de trabajar en la obra justo un mes antes de que naciera mi hijo. Y en televisión lo último que he hecho ha sido Res no tornarà a ser com
abans.
¿Qué plan tiene ahora, tras la maternidad, el disco, las clases?
Ahora ya no tengo plan. Solo de la música hace tiempo que ya no vivo. Pero lo que me gusta de ella es que soy yo quien genera los proyectos. Cuando trabajaba de mercenaria en el Lliure o el Nacional me daba cuenta de que cuando se acababa la obra me quedaba sin nada. Con la música no me ocurre. Ahora mismo estoy muy contenta con la vida.
En esos conciertos más íntimos que hace, en plan vermut con poca gente, en una cata de vinos, ¿no se siente infravalorada?
Ya, pero la vida son etapas. He vivido una etapa superbonita y ahora estoy en otra... sigo cantando y si el publico disfruta, ya me conformo. Tengo una profesión, tanto la de cantante como la de actriz, en la que si te desanimas mejor móntate un bar.
¿Por que no siguió Pastora?
Pues no lo sé. La idea era que esto iba a ser una parada... de hecho nos queda grabar un disco con Sony.
¿Siente nostalgia de aquel tiempo?
No, es que yo me lo paso muy bien también sola.