El Gobierno quiere cobrar ya en el 2019 la nueva tasa a las tecnológicas
El monto de la recaudación aún no se conoce, pero seguirá criterios de la UE
Hay prisa en el Ejecutivo español para empezar a aplicar a Amazon, Apple, Google y otras grandes tecnológicas un nuevo impuesto que debe ayudar a sufragar el aumento de las pensiones pactado con el PNV en los presupuestos.
El Gobierno quiere que el nuevo impuesto a empresas tecnológicas como Amazon, Apple o Google pueda comenzar a recaudarse el año próximo. Con esa tasa, el Ejecutivo de Mariano Rajoy prevé sufragar parte del incremento de las pensiones pactado con el PNV en los presupuestos. Lo anunció ayer desde Sofía, en Bulgaria, el ministro de Economía, Román Escolano.
El titular de Economía declaró que el Gobierno quiere presentar “cuanto antes” el impuesto a las grandes empresas digitales en España y que este tenga efectos en el 2019. Escolano participó en la reunión del consejo de ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE), celebrado en Sofía. “Nuestra idea es presentarlo cuanto antes y que tenga efectos también en el 2019 y sucesivamente”, dijo Escolano en rueda de prensa.
Ese nuevo impuesto, del que se desconoce la previsión de recaudación, fue anunciado el viernes por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante la rueda de prensa posterior al habitual Consejo de Ministros. Montoro dio detalles también del coste que tendrá para el Estado la subida de las pensiones del 1,6 % este año y una revalorización en el 2019 según el IPC, además del retraso al 2023 de la entrada en vigor del factor de sostenibilidad. El ministro de Hacienda cifró el coste en 1.500 millones este año y 1.800 el próximo ejercicio.
El anuncio del impuesto a las tecnológicas se produce cuando aún en el seno de la Unión Europea se discute la puesta en marcha de una tasa en el conjunto de los países. El proyecto que se analiza es el de una tasa del 3% sobre la facturación por ciertos servicios digitales de las empresas que facturen más de 750 millones de euros en todo el mundo y más de 50 millones en la UE. La introducción de la tasa en el caso español significa adelantarse a un posible acuerdo a nivel europeo, en línea con lo que ya han hecho otros países como el Reino Unido, Italia, Francia o Alemania, según explicó Escolano. “España se suma al grupo de principales países que ya tiene estas nuevas figuras y nos parece importante, en el contexto del debate que estamos teniendo, incorporar a nuestra legislación nacional figuras como las que ayer se anunciaron sin que esto signifique que el debate no tenga que seguir”, dijo el ministro. Preguntado sobre la forma que tomará la tasa en España, Escolano indicó que la definición europea “va en paralelo de la definición española” y que la tramitación de ambas “transcurrirán en paralelo”.
El ministro de Hacienda detalló el viernes que esta “nueva fiscalidad” se llevará al pacto de Toledo. Sobre la subida de las pensiones, el ministro de Economía indicó que el incremento anunciado para ambos años “está unido a un incremento de ingresos”, que se incluyó en el cuadro financiero publicado ayer.
La definición del impuesto irá “en paralelo” a la que se haga en la Unión Europea