Madrid al acecho
Rivera insta a Rajoy a mantener el 155 hasta acabar con el proceso separatista
El Gobierno de Mariano Rajoy no ha esperado ni un día para responder al discurso del candidato de JxCat a la presidencia de la Generalitat.
Frentista, sectario, divisorio, autocrático. El Gobierno, en un comunicado sin precedentes, hizo una dura crítica al discurso del candidato a la presidencia de la Generalitat, Quim Torra, por considerar que no es propio de un president tener en cuenta a la mitad de los catalanes, los que apoyan las tesis independentistas, insistir en la vía unilateral, en la ruptura de la unidad de España y en el ataque a la Constitución.
El Ejecutivo de Mariano Rajoy anunció que estará muy vigilante respecto a los actos que lleve a cabo el president, si finalmente es elegido, y ya amenaza con lo que hasta ahora ha sido su forma de afrontar el reto independentistas, los tribunales y el 155, aunque no lo cita. “Cualquier ilegalidad será reparada y cualquier vulneración de nuestro marco constitucional será respondida”.
No es que Rajoy se esperara otra cosa. De hecho, durante un acto del PP en Jerez (Cádiz), que se solapó con el discurso de investidura de Torra, el presidente del Gobierno, pese a haber empezado diciendo que “no voy a hacer juicios de valor sobre el candidato”, añadió que “lo que hemos visto y hemos escuchado no nos gusta”, porque sus palabras, según Rajoy, “no son representativas de la sociedad catalana”, aunque no fue más allá, porque “le juzgaremos por los hechos”.
Pero una hora después, cuando Torra había finalizado su intervención, el Gobierno consideró necesario juzgarle también por las palabras, dada la radicalidad de su discurso, que ni siquiera había guardado las formas, como había hecho Turull en la anterior investidura fallida.
De ahí que hiciera público un comunicado oficial, crítico y lleno de advertencias, que no incluye la invitación al diálogo que ha destacado en todas las intervenciones de Mariano Rajoy y del resto de los ministros en los últimos días.
“Sus palabras evidencian la escasa voluntad y capacidad de diálogo de unas formaciones que niegan la voz primero al conjunto de los catalanes y el entendimiento con el resto de los españoles”, dice el comunicado.
A juicio del Ejecutivo de Rajoy, el candidato a la presidencia de la Generalitat ha demostrado que no tiene ningún interés en construir un diálogo en el propio Parlament, en el conjunto de la sociedad y con nadie que no se someta exactamente a sus planteamientos”.
Para el Gobierno, “el señor Torra no se ha presentado como el presidente que merecen y que necesitan los catalanes” y con el discurso de ayer “ha renunciado a gobernar para todos ellos y a conectar con lo que la sociedad demanda en el momento actual”.
Rajoy, en su intervención en Jerez, se había comprometido a que su Gobierno garantizará tres cosas: que la ley y la Constitución se cumplan en toda España, que la unidad de España no se va a romper y que “nadie podrá actuar contra los principios de igualdad de los españoles, porque es la base de nuestra democracia”.
Tras escuchar el discurso de Torra tampoco el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, se quedó atrás y tildó de “incendiario” el discurso de Quim Torra, lo que a su juicio “evidencia que no cumplirá la Constitución”, y por eso miró más a Mariano Rajoy que al candidato a presidente de la Generalitat.
En un tuit publicado nada más acabar la intervención ante el Parlament le instó a que prorrogue la vigencia del artículo 155 de la Constitución, es decir, la intervención de la Generalitat.
“Rajoy debe rectificar: no levantemos el 155 hasta poner fin al proceso separatista”, decía el tuit de Rivera, que para justificar su petición subrayó una de las frases de Torra: “En unos días se levanta el 155 y no tendremos excusas para no trabajar sin descanso por la república catalana”.
Desde el Gobierno no se prevé la prórroga y menos si el nuevo president no hace nada ilegal para afianzar el procés independentista, aunque insiste en que seguirá vigilante sus actuaciones, y no lo temblará el pulso si tiene que volver a poner en marcha el artículo 155 para defender la unidad de España, la soberanía nacional y la Constitución española.
En eso espera poder contar con el PSOE, y parece que tendrá ese apoyo. Ayer, el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, aseguró que la letra del acuerdo político que se llevó al Senado para la aplicación del 155 “es muy clara” y establece como objetivos “restituir la legalidad estatutaria”, para lo cual debe devolver a Catalunya “a la legalidad constitucional”, y por eso se estableció que en el momento en que “hubiera un gobierno en la Generalitat de Catalunya, se levantaría el artículo 155”.
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