Soledad existencial
Angel Olsen
Lugar y fecha: Sala Barts (9/V/2018)
Hubiera sido fantástico poder escuchar en el recogimiento de una sala a Angel Olsen acompañada por la misma banda con la que actuó en el Primavera Sound. Pero aquella gira ya es agua pasada y ahora la cantautora y guitarrista estadounidense vino en solitario para presentar su último disco, Phases, aunque al final pasó por él de puntillas tocando un par de temas, el inicial Sans y un California que le arrancó el respetable.
El repertorio también obvió su álbum más célebre y eléctrico, My woman, para concentrarse en rescates de su primera época y estrenar temas nuevos, como Too easy o
All mirrors, incidiendo en un talante melodramático que sabe jugar de manera sofisticada con la voz, modulándola desde el susurro a los agudos rompedores y haciendo de este contraste su mejor logro. Aunque en su música hace gala de una soledad existencial digna de Sísifo, el sentido del humor y las bromas jocosas, entre canción y canción, contrarrestaron la tristeza lacrimógena que exhalan Iota o Acrobat.
Superados los problemas iniciales de sonido con su guitarra eléctrica, la reverberación engrandeció el folk oscuro de You are song, la belleza intimista y a la vez crispada de
Lonely universe o la voluntad de no sucumbir a la dependencia del amor que refleja Unfucktheworld.
Alternando sorbos de vino y agua para suavizar su garganta, al final llegaría lo mejor con la luz que llegó de Windows yun White fire que puso en evidencia el contraste entre el dolor de la soledad y el orgullo ciego de la juventud del que habla la letra, remarcados por las caricias de la guitarra y el oleaje entre la calma y la tempestad de su magnética voz.