Liberados en RD Congo los británicos secuestrados en el parque Virunga
Los dos turistas británicos secuestrados el pasado viernes en el parque nacional Virunga, en la República Democrática del Congo (RDC), fueron liberados junto con su conductor, anunció ayer el ministro de Exteriores del Reino Unido, Boris Johnson.
El vehículo de los turistas fue objeto de una emboscada, aparentemente por individuos armados no identificados cuando iban a salir del parque, a unos diez kilómetros al norte de la ciudad de Goma. Les acompañaba una guarda del parque, Rachel Makissa Baraka, que fue asesinada. El chófer resultó herido. Según la prensa local, el ejército se puso de inmediato a la búsqueda de los tres desaparecidos.
Los secuestradores podrían ser rebeldes que se esconden en el parque, famoso en todo el mundo por sus gorilas de montaña. Virunga es una de las zonas afectadas por la violencia en la RDC, pero constituye uno de los pocos destinos turísticos del país centroafricano y el parque es patrimonio de la humanidad desde 1979. Sin embargo, en estas montañas se esconden grupos armados de la vecina Uganda y milicias congolesas de carácter tribal.
El pasado 9 de abril, al menos cinco guardabosques y un conductor murieron en una emboscada tendida también en Virunga, confirmó entonces la dirección del parque, sin especificar quién fue responsable del incidente. Y en el 2014 el propio director del parque, el belga Emmanuel de Mérode, sobrevivió a un ataque. Ocho guardas forestales han muerto ya este año en Virunga, según la dirección del parque.
El este y el nordeste de la RDC llevan años sumidos en un largo conflicto entre numerosos grupos rebeldes, que siembran el terror pese a la presencia del ejército congoleño y las fuerzas de la misión de paz de la ONU.
Creado en 1925, en la época de la colonización belga, el parque Virunga, con su selva a gran altitud y sus sabanas, tiene una extensión de 7.800 kilómetros cuadrados, a lo largo de la frontera con Ruanda y Uganda entre el volcán Nyiragongo, a la salida de Goma, y los montes Rwenzori.
Desde principios de mayo, la oenegé británica Global Witness denuncia que el Gobierno pretende “desclasificar” 1.720 kilómetros cuadrados del parque para destinarlos a la explotación petrolera. A esta denuncia se han sumado una treintena de organizaciones congoleñas de defensa de la naturaleza y de los derechos humanos. Según las oenegés, “un proyecto de explotación de petróleo tendrá consecuencias irreversibles no solo sobre los ecosistemas naturales de Virunga sino también sobre los medios de subsistencia de las comunidades locales”.
Ocho guardas murieron este año en un parque refugio de rebeldes y amenazado por la explotación petrolera