Mujeres ‘post-it’
Hay que reformar el Código Penal, deprisa, deprisa, nosotros que cuando nos preguntan por la brecha salarial decimos “No nos metamos en eso”, que firmamos un pacto de Estado contra la Violencia de Género, con muchas mayúsculas pero sin presupuesto, porque para qué si ya nos hicimos la foto, nosotros ahora, con esa turba chillando bajo nuestras ventanas, deprisa, deprisa, que parezca que hacemos algo, vamos a hacer lo único que sabemos: echarle cárcel. Modifiquemos el Código Penal. ¿No hay una comisión de Codificación? Sí, señor ministro. ¡Que se presente! Se presenta y... resulta que son 20 hombres.
Huy, qué mal va a quedar eso en la foto. Pues no sé por qué. ¿No es lo que han hecho los hombres toda la vida? Cuando el año pasado Arabia Saudí creó el Consejo de las Mujeres, no encontró nada raro en el hecho de no incluir a ninguna mujer. También aquí el Estado Mayor, el Ibex 35 o la Conferencia Episcopal deciden entre hombres solos mil cosas que afectan a las mujeres. Ya, pero usted comprenderá que en estos momentos, esta foto... Ostras, y además, ahora que me acuerdo, ¿no había una ley...? Sí, la de igualdad, esa que propuso el PSOE pero la votamos también nosotros, cualquiera se atreve a no votarla, y el artículo 54 dice que los organismos del Estado deben ser paritarios. Pero ¿cómo?, esa ley, ¿era para cumplirla?, si ya nos hicimos la foto... Pues algo tendremos que hacer, tal como está el patio. ¡Que pongan mujeres en la comisión esa de los cojones! ¿Cuántas, señor ministro? Bah, media docena. Temporales, ¿eh?, no se me vayan a apoltronar. Ya sabe, eso que ahora hace todo el mundo: en marzo, por lo del día de la Mujer, se ponen, en abril se quitan y aquí paz y después gloria.
Pero esta vez les ha salido mal. Porque estamos hartas, hartas, hartas. De que ellos decidan sobre el mundo y sobre nosotras, sin nosotras. De que cuando protestamos pongan a unas cuantas y luego las quiten, como post-its. Esta vez nos hemos negado y la comisión al completo, avergonzada, ha dimitido. Habrá una nueva, paritaria. Pero a ver si se enteran quienes se tienen que enterar de que les vemos el plumero. De que estamos hasta el moño de exclusión y de parches, y como primera providencia vamos a exigir que se cumpla el artículo 54 de la ley orgánica 3/2007 de 22 de marzo, y luego, uno por uno, epígrafe a epígrafe, los 77 artículos restantes. ¡Demonios!