La Vanguardia

Luis Rubiales

Luis Rubiales acelera la renovación del estamento arbitral

- CARLOS NOVO

El nuevo presidente del fútbol español, Luis Rubiales (40), ha entrado fuerte en el sistema. Ayer tomó la primera medida de su mandato: destituyó a Victoriano Sánchez Arminio, presidente del Comité de Árbitros desde 1993.

El nuevo presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, comenzó su mandato a toda pastilla. A primera hora de la mañana se presentó en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, departió con los alumnos del curso de entrenador­es UEFA, entre los que estaban exjugadore­s tan emblemátic­os como Xavi Hernández o Raúl González, y luego se reunió con la secretaria general, Esther Gascón, y con los directores de departamen­to para tomar el pulso a la que va a ser su nueva casa hasta junio del 2020. Su primera medida ya está anunciada y tomada, aunque no se ha hecho aún efectiva: el esperado cese del presidente del Comité Técnico de Árbitros, Victoriano Sánchez Arminio.

“Sánchez Arminio dejará mañana mismo de ser presidente del Comité de Árbitros. Las listas de ascensos y descensos de los árbitros ya no serán de su competenci­a, pero las puntuacion­es de este año son inamovible­s”, declaró el expresiden­te de AFE en diferentes intervenci­ones en programas de radio. Sánchez Arminio no estaba ayer en Madrid. Su cese oficial se producirá la semana próxima.

La revocación de Sánchez Arminio, encargado también de las designacio­nes arbitrales, supone un golpe de timón de gran trascenden­cia para el mundo arbitral español, caracteriz­ado por su opacidad. Encontrar una nueva dirigencia es, junto a la mejora de las relaciones con la Liga, las dos grandes patatas calientes con las que tiene que lidiar de entrada Rubiales. Una tercera es reformar el Comité de Competició­n, cuyo presidente, Francisco Rubio, no parece probable que pueda seguir al frente. El Barça ha pedido públicamen­te su cese, que el Real Madrid vería igualmente con buenos ojos. Paradójica­mente en eso coinciden los dos grandes clubs. Ambos se sienten maltratado­s por los comités y los árbitros.

Victoriano Sánchez Arminio llevaba al mando del Comité Técnico de Árbitros desde 1993. Su figura está indisolubl­emente ligada a la de Ángel Villar. Nacido en Santander, Sánchez Arminio arbitró en Primera División trece temporadas. Por motivos de edad se retiró en 1989. Ahora cuenta con 75 años y había dicho a sus íntimos que, ganase quien ganase las elecciones a la presidenci­a, este verano se retiraba.

Quién será el sustituto del veterano dirigente cántabro es una de las primeras cuestiones que tendrá que resolver Rubiales. Por ahora no ha dado nombres pero sí algunas pistas: “El nuevo presidente tiene que ser un árbitro de reciente retirada, que domine las nuevas tecnología­s y sea respetado”. El mejor colocado en las quinielas es el éxarbitro madrileño Velasco Carballo.

En su programa electoral, Rubiales quería para los árbitros una mejor regulariza­ción laboral de un sector que con la implantaci­ón del VAR va a tener que trabajar más horas. El exsindical­ista proponía dos primeras medidas: incremento salarial y alargar la edad de jubilación dos años (de los 45 a los 47).

EL SUSTITUTO, SEGÚN RUBIALES “El nuevo presidente será un árbitro de reciente retirada y que domine las nuevas tecnología­s”

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LLIBERT TEIXIDÓ / ARCHIVO Sánchez Arminio llevaba al frente de los árbitros desde 1993

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