Sánchez embiste al president y le equipara con Le Pen
Rivera pide a Rajoy que no sea rehén de “los nacionalistas”
Pedro Sánchez encuentra como mejor argumento para combatir el secesionismo catalán, y para intentar desmontar su discurso en toda Europa, precisamente, la figura del nuevo presidente de la Generalitat. “¡Torra es el Le Pen de la política española!”, clamó ayer el líder del PSOE.
Al equiparar a Quim Torra con la extrema derecha xenófoba del Frente Nacional francés, gracias a los tuits y escritos en los que el propio presidente de la Generalitat fijó en el pasado unas posiciones políticas cuajadas de invectivas contra “los españoles”, en la dirección del PSOE quieren neutralizar la imagen y el discurso internacional de una “idílica revolución de las sonrisas”, de una Catalunya oprimida bajo el yugo de una España fascista. Y desvelar el verdadero rostro de un secesionismo catalán que, ahora sí, intentan vincular a los “movimientos reaccionarios, populistas y xenófobos” que crecen en toda Europa. “Torra –insistió ayer Sánchez desde Mérida– representa todo lo contrario a los valores constitucionales e incluso europeos”. Unos valores que, dijo, se sustentan en la solidaridad, el respeto a la ley y la integración, “y no en la exclusión en función de caracteres etnicistas” que atribuyó al ideario de Torra.
Sánchez y la dirección del grupo socialista en el Parlamento Europeo ya están difundiendo este mensaje. Y, con sus conversaciones y reuniones con líderes europeos y de la familia socialdemócrata, el líder del PSOE aseguró que “los tuits, las declaraciones, las reflexiones y los artículos de Torra han escandalizado a la opinión pública europea, que está convulsionada al conocer que la xenofobia ha tomado las riendas del movimiento independentista en Catalunya”. Unas declaraciones que tachó de “racistas, xenófobas, excluyentes y antieuropeas”. Sánchez, además, avisó a Torra que va a tener “enfrente” al PSOE, que se ocupará de “defender y garantizar los derechos y las libertades” de todos los españoles y catalanes.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, continuó ayer, por su parte, señalando los planteamientos “racistas” de Torra y su intención de nombrar consellers a algunos de los procesados por rebelión como las pruebas por las que Rajoy no debería levantar el artículo 155, sino ampliarlo y endurecerlo. “Si hay que escoger entre la agenda de los nacionalistas y la de los españoles, nosotros nos quedamos con España”, afirmó Rivera en un acto multitudinario en Granada.
En Catalunya, la diputada de Cs Sonia Sierra calificó de “surrealista” la posible restitución de consellers en el Govern de Torra, ya que, en su opinión, el nuevo ejecutivo catalán debería trabajar para “todos los catalanes” en lugar de persistir en el “lío”. Sierra recalcó que el impedimento no es tanto de nombres como de que las formaciones independentistas “no quieren gobernar”.
El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, también censuró al nuevo presidente de la Generalitat, cuyas ideas, dijo, son “propias de dirigentes ultranacionalistas y fundamentalistas”, y consideró que su pensamiento le dificultará su función al frente del Govern. En El Obrero criticó el “desprecio hacia lo español y hacia los catalanes que se sienten también españoles” que ve en Torra.
La portavoz del PP catalán, Andrea Levy, al ver la dificultad para constituir un nuevo gobierno, acusó a Torra de usar las instituciones catalanas “casi como una sucursal a las órdenes de lo que dice el fugado de la justicia”.
El PSC ve en Torra un “fundamentalista” y avisa que sus ideas serán un obstáculo para gobernar