Jugando en casa
Alfonso Vilallonga repasa su cancionero dos noches con acompañamientos diferentes
Alfonso Vilallonga es seguramente uno de los artistas más atípicos que moran estas latitudes desde hace años. Una atipicidad en absoluta reñida con el listón cualitativo, que en su caso se esparce por varias facetas como las de cantante, showman, compositor o actor. De forma poco habitual, hoy y mañana el creador barcelonés hará suyo el escenario de El Maldà, un espacio por otra parte íntimamente ligado a su persona, ya que en su día fue residencia del barón de Maldà, un título que hoy posee el músico por transmisión familiar.
En cualquier caso, Vilallonga –cuya popularidad le viene dada especialmente por su vertiente de compositor de bandas sonoras de películas: Blancanieves, de Pablo Berger, Princesas, de Fernando León de Aranoa, o Mi vida sin mí y La librería, ambas de Isabel Coixet– estará en su salsa por otras razones. Principalmente porque en estas dos veladas ejercerá de intérprete de sus canciones, que es el formato que seguramente más aprecia, y que podrá desarrollar en la distancia corta de un escenario como el de El Maldà.
El atractivo añadido que presenta esta doble concierto es que Alfonso Vilallonga estará acompañado por artistas diferentes. En la sesión de esta noche se presentará en formato de dúo con el extraordinario guitarrista Pau Figueres, y contará con la colaboración de Rita Payés, que aporta su voz y el sonido de su trombón. Y mañana estará arropado por The Darling String Quartet, una formación de cuerda integrada por Elena Rey y Marta Cardona (violines), Uixi Amargós (viola) y Manuel Martínez del Fresno (chelo).