La Vanguardia

“Ataco, nunca dejo de luchar y aprovecho cada oportunida­d”

Anna Muzychuk, gran maestra mundial de ajedrez

- ANA JIMÉNEZ VÍCTOR-M. AMELA

Tengo 28 años. Soy ucraniana y también tengo nacionalid­ad eslovena. Soy gran maestra mundial de ajedrez. Estoy soltera, sin hijos. ¿Política? Que hablen los que saben. ¿Creencias? Soy cristiana. No competiré nunca en un país donde se sojuzgue y discrimine a las mujeres

Qué pieza le agrada más? El caballo. ¿Por qué? Me gusta que salte por encima de otras, su juego combinativ­o. ¿Cuál es su jugada favorita? La apertura española. Con negras y blancas.

¿Es usted defensiva u ofensiva?

Yo ataco, mi naturaleza es atacar.

¿Cuál es su punto fuerte?

Presiono al rival toda la partida sin altibajos.

¿Y su punto débil?

No voy a dar pistas a mis rivales.

¿Qué la desconcent­ra?

Puede desconcent­rarme un gesto, un ruido..., pero vuelvo a concentrar­me rápido.

¿Por qué no compiten mujeres contra hombres?

El ajedrez no es sólo mental, es también muy físico: a partir de la octava hora, el hombre tiene más resistenci­a y la mujer pierde fuelle. A mí empieza a dolerme la cabeza.

¿Eso es todo?

Sí, no hay diferencia cerebral. Yo procuro ir al gimnasio tres veces por semana.

Se ha negado a competir en Arabia Saudí por cómo tratan a sus mujeres...

Luego han permitido que puedan competir sin velo. No basta: la mujer sigue sojuzgada en la calle y discrimina­da en todo el país.

¿Ha servido para algo su decisión?

Sí: mucha gente se ha enterado de cómo tratan allí a la mujer. ¡Ojalá recapacite­n! Entre tanto, que cada uno tome sus decisiones.

¿Mientras eso no cambie, usted no jugará en ese país?

No jugaré: renuncio a 160.000 dólares, la bolsa para la vencedora. El vencedor varón, por cierto, gana 500.000 dólares...

Brecha salarial en el ajedrez...

Por ganar el Campeonato de Europa obtuve 20.000 dólares.

¿Hubiera ganado en Arabia Saudí?

Creo que sí: acabo de ganar el Campeonato del Mundo de jugadas relámpago.

Es usted una de las cuatro mejores ajedrecist­as de la historia...

Así es, con Judit Polgár, Humpy Koneru y Hou Yifan.

¿Quién le enseñó a jugar al ajedrez?

A los dos años ya jugaba: mis padres eran entrenador­es de ajedrez.

¿Recuerda su primera partida?

Fue a los tres años. A los cuatro años gané mi primer torneo, en mi ciudad. Y a los siete años era campeona de Europa sub-10.

¿Su infancia fue un tablero de ajedrez?

Y viajes arriba y abajo, con mis padres. Muchos en autocar, porque no tenían dinero. Recuerdo un viaje a España en autocar: cuatro días de ida, cuatro días de vuelta...

¿Y le ha merecido la pena tanto sacrificio?

Yo estaba a gusto. Sí añoraba a mis compañeros de escuela... Recibía clases particular­es para no perder cursos...

¿Y se gana bien la vida hoy en día?

El ajedrez no es como el fútbol o el tenis, pero puedo vivir bien de competir. Ojalá el ajedrez fuese deporte olímpico y tuviese más proyección popular.

¿Cuál ha sido su partida más especial?

Contra la campeona del mundo Stefanova, en julio del 2016. Yo ya tenía dos campeonato­s del mundo y a media partida pensé: “¡Ganar otro es mucho pedir!”. Y desfallecí. Pero enseguida me rehíce. Y vencí.

¿Dónde reside su fuerza mental?

No dejo de luchar nunca. Busco todas las oportunida­des. Y ataco.

¿Y si le entran ganas de ir al váter, qué?

Muevo pieza y voy pitando, mientras el rival piensa su jugada. Lo malo es si mueve rápido y empieza a contar mi tiempo... Ha pasado.

¿Por qué ha competido por Eslovenia?

Por mi juventud, Ucrania no me permitió competir. Y Eslovenia, sí: me nacionalic­é eslovena y jugué. Desde el 2014 volví a representa­r a Ucrania, lo que siempre quise.

¿Contra qué gran maestro le gustaría jugar?

¡Kárpov! Ha sido el gran maestro que más torneos ha ganado, ¡más de 160! Y creo que dentro de poco jugaremos.

¿Qué tres cualidades se necesitan para jugar bien al ajedrez?

Pasión. Tenacidad. Capacidad de superar la frustració­n.

¿Qué frustració­n?

La de perder. Bobby Fischer dejó de competir a los 29 años por eso. Hay más casos...

¿No teme enloquecer, como Fischer?

No. Hace poco, una chica ajedrecist­a, Nana Alexandria, se ha hundido en la depresión por unas malas puntuacion­es...

¿Qué le diría a una joven aficionada al ajedrez?

Si te gusta mucho jugar, ¡sigue! Si lo haces por tus padres o por otro, ¡déjalo!

¿Es compatible el ajedrez y un novio?

Es complicado, pero espero un día casarme, tener hijos y vida familiar tranquila y feliz. Soy muy casera. Pero ahora no tengo novio.

¿Qué le dirá al candidato que llegue?

“No entenderás qué hago tantas horas ante un tablero de ajedrez y una pantalla..., ¡pero ámame!”. Ah, y añadiré: “Viajo mucho”.

¿Hasta cuándo seguirá jugando?

Me gusta mejorar y me esfuerzo al máximo: pero si llega el día en que el esfuerzo que hago no compensa la mejora... lo dejaré.

 ??  ??
 ?? VÍCTOR-M. AMELA
IMA SANCHÍS
LLUÍS AMIGUET ??
VÍCTOR-M. AMELA IMA SANCHÍS LLUÍS AMIGUET

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain