Fiebre por los cromos
El intercambio para acabar el álbum traspasa la calle y explota en internet
El intercambio para acabar las colecciones de los álbumes de cromos traspasa la calle y explota en internet. Una de las webs más populares en España, Cromosrepes, registra más de 66.000 usuarios.
El cromo, el de toda la vida, vive uno de los momentos más dulces de su historia. En el top ten, los álbumes de fútbol, tema líder, y también las series de dibujos animados u otros clásicos de siempre como los animales. Los dinosaurios son tendencia junto al Mundial de Rusia. En plena era digital, con todos sus efectos transformadores, abrir sobres de papel, pegar cromos e intercambiar los repes por los faltis para completar las colecciones engancha al público infantil.
Junto a los pequeños también se aficionan los mayores, muchos padres y madres que recuerdan con nostalgia la eclosión del fenómeno cuarenta años atrás y se implican ahora más que nunca para ayudar a acabar el álbum. El cromo sabe aprovechar la digitalización para ganar adeptos.
Lo que antes se hacía en exclusiva en el patio de la escuela y la calle, cambiar cromos, se puede hacer ahora con una gran ayuda: los foros de internet y las webs especializadas; una de las de mayor éxito (Cromosrepes.com) ha superado en poco más de un lustro los 66.000 usuarios registrados, más de la mitad activos casi a diario, atraídos por más de 5.000 colecciones, actuales e históricas, globales y locales: de los Invizimals o Dragon Ball al equipo de baloncesto de la ciudad.
Tras el cromo se favorece otra forma de comunicación vintage, en este caso sí en claro declive, el correo postal. Los foreros, como se conocen los usuarios, se intercambian sus cromos por carta con otros aficionados. “Fundé la web hace ocho años buscando sitios donde cambiar cromos para ayudar a mi hija a acabar su colección porque no había nada en internet. Los niños de hoy no saben cambiar cromos como hacíamos nosotros. La web no ha parado de crecer”, explica Francisco López, creador de Cromosrepes.com, informático de profesión. “No es ningún negocio, todo es colaborativo”, asegura. La publicidad y las colaboraciones de los usuarios prémium les ayudan a costear los servidores.
Nunca antes se habían vendido tantos cromos como ahora, aseguran algunas voces del sector. “El niño y la niña lo siguen encontrando divertido, y además es pedagógico y educativo. El cromo vivirá eternamente”, dice Lluís Torrent, director general en España y Portugal de Panini, la empresa que más cromos vende en todo el mundo: más de 700 millones de cromos en 120 países.
Los cromos se siguen intercambiando en la calle, en lugares emblemáticos de las grandes ciudades: en Barcelona, junto al mercado de Sant Antoni, y en Madrid, en el Rastro. El cromo entretiene en el ámbito privado, cuando se pegan los cromos y se disfruta del álbum, pero también en un entorno de socialización. Webs especializadas en oferta de entretenimiento para familias recomiendan los
DIGITALIZACIÓN
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