Rusia pierde cuatro “asesores militares” en un ataque en Siria
Aunque el papel de Rusia en la guerra civil de Siria se centre en apoyo aéreo y asesoramiento sobre el terreno al Gobierno de Damasco, eso no aleja a sus tropas de los riesgos de la guerra. El Ministerio de Defensa ruso comunicó ayer la muerte de cuatro de sus militares en un enfrentamiento con fuerzas “terroristas” al sudeste del país árabe.
Su muerte fue consecuencia de un ataque en la provincia de Deir Ezzor. “Una batería de la artillería del Gobierno sirio fue atacada por varios grupos terroristas. Dos de los consejeros militares rusos, que dirigían el fuego de la batería siria, fallecieron en el lugar”, explicó el ministerio. Otros cinco resultaron heridos y fueron trasladados a hospitales militares rusos. Dos de ellos fallecieron después por las heridas. La información facilitada no especifica cuándo se produjo el ataque.
Con anterioridad, el grupo de investigación Conflict Intelligence Team informó de la muerte de un soldado ruso de 25 años. Uno de sus familiares dijo al servicio en ruso de la BBC que servía en las tropas de lucha radioelectrónica y murió durante un ataque del Estado Islámico (EI) cerca de la ciudad de Meyadin, en la provincia de Deir Ezzor. Sus funerales se celebraron el sábado pasado en Smolensk.
El periódico de investigación Nóvaya Gazeta aseguraba que el número de rusos fallecidos era de seis: cuatro de ellos, militares del ejército, y dos, mercenarios de la compañía militar privada conocida como Wagner, cuya participación en el conflicto de Siria se conoció hace varios meses.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Reino Unido, aseguraba ayer que en el ataque habían muerto nueve militares rusos y 25 sirios. “Murieron 35 combatientes del Gobierno, incluyendo al menos nueve rusos. Algunos rusos eran tropas regulares, pero no todos”, aseguró a AFP Rami Abdelrahman, que dirige la oenegé.
El ejército sirio recuperó la ciudad de Deir Ezzor en noviembre, aunque el EI mantiene activos varios grupos en esa provincia.
Oficialmente, Rusia reconoce más de 80 bajas desde septiembre del 2015, cuando empezó a dar apoyo a las autoridades de Damasco, aunque sólo la mitad en combate. Este mes de mayo, el ejército ruso sufrió bajas en otras dos ocasiones, debido a dos accidentes aéreos: el de un caza Su-30 el día 3 y el de un helicóptero Ka-52, el 7.
Tras siete años de guerra civil, el Gobierno de Bashar el Asad, con el apoyo de Rusia e Irán, controla la mayor parte del centro del país. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el conflicto ha causado más de 500.000 muertos.