Incidentes en la plaza Sant Jaume por los símbolos
La plantada de cruces en Mataró se hace con telas
La plaza Sant Jaume de Barcelona fue escenario ayer de momentos de tensión, cuando un pequeño grupo de la amplia manifestación por la unidad de España, que discurría en tono festivo por las calles de la ciudad, se enfrentó a unos operarios que intentaban apuntalar el lazo amarillo que cuelga de la fachada del Ayuntamiento, cuya estabilidad estaba en riesgo a causa del viento y que fue retirado. Algunos de los manifestantes intentaron incluso forzar la entrada en el Consistorio para descolgarlo, lo que provocó un pequeño altercado, que se resolvió sin mayores consecuencias.
Superado el incidente, los manifestantes, varios centenares, siguieron su recorrido, acompañados de una camioneta que ponía la banda sonora, haciendo sonar repetidas veces el himno español y la canción “Viva España” de Manolo Escobar. Un grupo de participantes bajaron hasta la playa de San Sebastián, en la Barceloneta, y desplegaron unas 300 banderas españolas, entre proclamas de “España entera y solo una bandera” y “Puigdemont, a prisión”. Esta iniciativa pudo desarrollarse sin incidentes.
Otro acto reivindicativo, este por la libertad de los políticos presos, congregó en la mañana de ayer a un centenar de personas en la playa del Varador de Mataró, convocados por el CDR de la capital del Maresme. Los Mossos d’Esquadra habían desplegado un amplio dispositivo en la zona, pero no tuvieron que intervenir. En lugar de clavar cruces de madera en la arena –para lo que se necesita autorización municipal, que no tenían–, desplegaron toallas de color amarillo formando cruces, en una zona que no utilizan los bañistas. Con ello, los convocantes también pudieron eludir los registros que la policía local llevó a cabo en los vehículos que accedían a la playa a primera hora.
Por otra parte, en Sitges, un concejal de Cs denunció la rotura de un cristal en su vivienda por el lanzamiento de una piedra.