La princesa Catalina se toma 26 semanas de baja maternal, hasta octubre
La duquesa de Cambridge aprovechará el permiso maternal completo hasta octubre
La princesa vuelve a vestir de Zara, esta vez para acudir con sus dos hijos mayores a una carrera de caballos
La boda del príncipe Enrique y Meghan Markle será el último acto oficial de Catalina de Cambridge después de haber dado a luz, el pasado 23 de abril, a su tercer hijo, Luis. La duquesa de Cambridge se tomará la baja por maternidad que le corresponde a todas las madres británicas, en principio de 26 semanas, ampliables hasta 52, y regresará a sus ocupaciones oficiales en octubre. Aunque habrá dos paréntesis: el bautizo de su hijo pequeño, para el que todavía no hay fecha ni se han elegido padrinos, y la ceremonia de regimientos del ejército británico que se celebrará en junio en honor de la reina Isabel II.
Prueba de que Catalina está de baja maternal es que los duques de Cambridge no estuvieron presentes en la fiesta en el jardín del palacio de Buckingham por el próximo 70º cumpleaños del príncipe Carlos a la que sí asistieron los duques de Sussex, Meghan y Enrique.
Catalina sólo se tomó cinco semanas de descanso cuando nació Jorge, su hijo mayor, el 22 de julio del 2013, mientras que tras dar a luz a Carlota, que nació el 2 de mayo del 2015, cogió una baja de casi seis meses. El biógrafo real Duncan Larcombe ha explicado al Daily Express que para “las nuevas mamás de la familia real será tradición tomarse un descanso de seis meses de los compromisos oficiales. La boda [de Meghan y Enrique] no cuenta porque fue una celebración familiar, pero aparte de eso, Catalina elegirá sus compromisos”. De modo que se ha sentado un precedente para cuando la duquesa de Sussex sea madre.
Catalina ha explicado en varias ocasiones que para ella es importante ocuparse personalmente de sus hijos, como reiteraba el pasado 23 de abril en una carta dirigida a los hospicios infantiles del área de East Anglia, de los que es patrona: “Pasar tiempo de calidad con mis hijos es un aspecto importante de la vida familiar. Como madre, aprecio especialmente los momentos más simples, como jugar juntos”.
Por su parte, el príncipe Guiller- mo ha sido nominado al premio de Papá del Año británico tras el nacimiento de su tercer hijo. Ambos royals, no obstante, cuentan con la inestimable ayuda de la nanny María Teresa Turrión Borrallo para cuidar de sus tres vástagos. Esta palentina es la primera niñera no británica que se pone al servicio de la casa real inglesa. Llegó para cuidar a Jorge, sustituyendo a Jessie Webb, quien ya había estado a cargo de los príncipes Guillermo y Enrique cuando eran pequeños.
El pasado domingo, Catalina acudió con sus dos hijos mayores a seguir las tradicionales carreras de caballos de Hougthon, en el condado de Norfolk, un deporte en el que se está iniciando el primogénito de los duques de Cambridge. La esposa del príncipe Guillermo abandonó sus recu-
rrentes estilismos de Alexander McQueen y estrenó un cómodo vestido de la nueva temporada de Zara de color celeste con flores bordadas, que se vende en su web por algo menos de 40 euros. Es un modelo abotonado con escote Bardot y un lazo que permite ceñirlo más o menos a la cintura. Al ser regulable, es una buena fórmula para mujeres que han sido madres recientemente. El gran bolso de lona azul marino con tiras de cuero que lleva Catalina en las fotos mientras jugaba con sus hijos en Hougthon es de la firma australiana Little Makes Big, cuesta 122 euros y se agotó en la web de la marca a las pocas horas de publicarse las fotografías donde lo lucía la duquesa de Cambridge. Este mismo modelo de bolso ya lo llevó su hermana, Pippa Middleton, el pasado enero.