Otro desprendimiento de rocas obliga a cortar otra carretera en Lleida
El desprendimiento de una roca de grandes dimensiones mantiene cortada la carretera L-913, en el término municipal de Vilanova de Meià, Lleida, desde el miércoles por la noche. Los cascotes obligaron a cortar el tráfico en ambos sentidos de la marcha, y ayer, con las primeras luces del día, empezaron las labores de limpieza de la vía.
Precisamente en Lleida, se produjo el pasado 16 de abril un desprendimiento de rocas en la LV9124, en el término municipal de Castell de Mur, que causó la muerte de los dos ocupantes de un vehículo que quedaron sepultados bajo las piedras. El presidente de la Diputación de Lleida, Joan Reñé, anunció esta semana que espera que esa carretera pueda reabrir a finales de junio.
Las actuaciones en la zona han comportado el acondicionamiento de un camino provisional, trabajos de saneamiento de la pared, la limpieza de la vertiente, la reconstrucción de la carretera y la reposición medioambiental del entorno. Unas obras que tienen un presupuesto de entre 430.000 y 450.000 euros y que asumirá la Diputación de Lleida.
Por otra parte, el Servei Català de Trànsit inicia hoy un campaña de seguridad para los viajeros de autocar. A partir de ahora, se proyectará en todos los trayectos un vídeo con las medidas básicas de seguridad, como recordar la obligatoriedad de abrocharse el cinturón de seguridad o no levantarse del asiento mientras el vehículo está en marcha. La campaña la presentó ayer la directora de Trànsit, Eugènia Domènech.