Muchas mujeres con cáncer de mama no se benefician de la quimioterapia
Un test genético aclara en qué casos se puede prescindir del tratamiento
Alrededor del 70% de las mujeres que tienen un cáncer de mama diagnosticado en sus fases iniciales, y con un tumor de riesgo considerado intermedio, pueden prescindir de la quimioterapia sin que empeore el pronóstico de la enfermedad. Es la conclusión a la que ha llegado un estudio en el que han participado más de 10.000 mujeres que está destinado a cambiar el tratamiento de un elevado porcentaje de cánceres de mama.
Los resultados del estudio, financiado por el Gobierno de EE.UU., se presentaron ayer en el congreso de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus iniciales en inglés) que se está celebrando en Chicago. Con unos 40.000 participantes, es el mayor encuentro anual de oncólogos del mundo. Los resultados se publicarán próximamente en la revista The New England Journal of Medicine.
“Es un gran avance”, declaró Larry Norton, especialista en cáncer de mama del hospital Memorial Sloan Kettering de Nueva York que tuvo un papel decisivo en la puesta en marcha del estudio hace más de una década. Significa que “tal vez 100.000 mujeres sólo en Estados Unidos”, y muchas otras en el resto del mundo, “no necesitan la quimioterapia” que reciben actualmente y podrían evitar sus efectos secundarios.
El objetivo del estudio era determinar la mejor forma de tratar a mujeres con cáncer de mama diagnosticado en estadios iniciales (lo que incluye a la gran mayoría de los que se detectan en mamografías rutinarias) y que responde a tratamiento hormonal (lo que representa alrededor del 80% de todos los cánceres de mama).
Los autores del estudio evaluaron el riesgo de reaparición del cáncer en un plazo de diez años a partir de un test que analiza 21 genes en células del tumor y que ofrece un resultado en una escala de 0 a 100. Dicho test ya se ha empezado a utilizar en numerosos hospitales, incluidos algunos de España.
En la actualidad, cuando el resultado del test es bajo, con un valor de 0 a 10, lo que indica que hay una probabilidad muy pequeña de que el cáncer reaparezca, las pacientes son tratadas sólo con cirugía para extirpar el tumor y con terapia hormonal.
Cuando el resultado del test es alto, de entre 25 y 100, el tratamiento hormonal se complementa con quimioterapia para minimizar el riesgo de que el cáncer reaparezca años más tarde.
Pero cuando el resultado es intermedio, en el intervalo de 10 a 25, no estaba claro si es mejor para las pacientes recibir quimioterapia o no.
Las 6.711 mujeres participantes en el estudio que tuvieron un resultado en este intervalo intermedio se dividieron en dos grupos. Aproximadamente la mitad recibió sólo terapia hormonal. La otra mitad recibió además quimioterapia. El estudio se restringió a mujeres que no tenían células cancerosas en los ganglios linfáticos (puesto que ya no se considerarían en un estadio inicial de la enfermedad) y que no tenían receptores HER2 en sus células tumorales (puesto que podrían responder a otros tratamientos dirigidos contra estos receptores).
Según los resultados presentados en el congreso de Chicago, las pacientes mayores de 50 años de riesgo intermedio no obtienen ningún beneficio adicional de la quimioterapia. Es decir, no se modifica el riesgo de reaparición del cáncer en un plazo de diez años.
En mujeres menores de 50, la
El estudio se ha realizado con pacientes en que la enfermedad se había diagnosticado en una fase inicial
quimioterapia reduce el riesgo de recidiva cuando el resultado del test genético se sitúa entre 16 y 25.
Según datos de Estados Unidos, el 40% de las mujeres con cáncer de mama no se benefician de tests para predecir el riesgo de reaparición del cáncer y, por lo tanto, no se puede decidir el mejor tratamiento en función de este riesgo. “Este estudio proporciona la prueba de más alto nivel de que nuestro test es imprescindible en la práctica clínica”, ha declarado Steven Shak, director científico de la empresa Genomic Health, que comercializa el test utilizado en el estudio.