El PP no da margen a Sánchez y se lanza a una oposición sin concesiones
Iglesias reprocha al líder socialista que ha olvidado a quien le hizo presidente
El Gobierno de Pedro Sánchez no tendrá los 100 días de gracia que se suele conceder a quien llega el poder. No los tendrá ni por parte del PP, dolido aún por la forma en la que le ha sacado de la Moncloa, ni tampoco del lado de Podemos, molesto porque el nuevo presidente no contó con ellos para nombrar algún ministro. Sólo Ciudadanos parece estar dispuesto a darle un margen.
Aún no habían tomado posesión todos los ministros, y el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, que ha quedado como cabeza visible de la oposición, hizo un duro envite contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Con la minoría mayoritaria que tiene en el Congreso, el PP ha pedido dos cosas: la primera, la comparecencia inmediata de todos los ministros en las comisiones correspondientes, para explicar sus planes; la segunda, la celebración del debate sobre el estado de la nación que Mariano Rajoy ya había anunciado para este mes. Por el contrario, criticó que la junta de portavoces haya anulado la sesión de control prevista para el miércoles próximo, para dar tiempo a los ministros a aterrizar en sus despachos.
El PP quiere demostrar que la situación interna que vive, tras el anuncio de Rajoy de que no seguirá al frente del partido, no le impedirá cumplir con su tarea y hacer una oposición, dijo Hernando, “leal, responsable y sensata”, pero también “sin concesiones”. Y para muestra un botón. Las primeras palabras que Hernando dedicó al Gobierno de Sánchez fueron para denominarlo “Gobierno pasarela”, un ejecutivo “pensado para el marketing y las próximas elecciones”.
Pero no sólo el PP criticó al equipo de Sánchez. Desde el lado opuesto, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, también mostró su discrepancia con la composición del nuevo Gabinete, que considera un guiño a Ciudadanos y al PP, ya que tiene hasta ministros conservadores, como Fernando Grande-Marlaska.
El líder de Podemos se siente defraudado porque, a su juicio, Sánchez “ha tardado 24 horas en olvidarse de quién le ha hecho presidente del Gobierno”. En una entrevista en TVE, Iglesias consideró que la formación del Consejo de Ministros ha sido “una auténtica declaración de principios”, con “gente que le gusta a Ciudadanos y al PP”, y con nadie que pueda reconocerse como una figura cercana a Podemos, que le apoyó para que saliera adelante la moción de censura. Eso, a su juicio, es imprudente, porque “le convierte “en el Gobierno más débil de la Unión Europea” con lo que el paso por la Moncloa, indició, “puede ser un calvario para Pedro Sánchez”.
Desde Ciudadanos las críticas no fueran tan duras. Su portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta, cree que Pedro Sánchez ha formado un Gobierno de “personas muy respetables” y “buenos profesionales y buenos técnicos”. Sin embargo, para Ciudadanos no se trata tanto de los nombres de los ministros, como de cuál será el programa de gobierno que va a aplicar el líder socialista, y que aún se desconoce, porque en el debate de la moción de censura no lo presentó.
A la espera de que el presidente del Gobierno despeje cuáles son sus planes y “con quién va a llegar adónde”, Cs le muestra sus prioridades “particularmente urgentes”, que son la definición de los planes concretos para Catalunya, “donde el desafío permanece prácticamente inalterable”, y la precariedad laboral, para lo cual espera conocer la reforma del mercado de trabajo que propondrán los socialistas.
Los populares piden las comparecencias de los ministros y que se convoque el debate del estado de la nación