De Twitter... al BOE
El ministro levanta polémica en las redes sociales por el contenido de algunos de los más de 71.000 tuits que ha escrito en los últimos años
Màxim Huerta ha dado mucho trabajo, en tan solo dos días, a los rastreadores de tuits –prolífico, ha escrito un total de 71.500, según puede leerse en su cuenta–, que han peinado la red en busca de frases que contrasten con su actual responsabilidad ministerial.
Los más destacados han sido tal vez los que hacen referencia a su animadversión al deporte, uno de los temas de los que se ocupa su ministerio. “Menos deporte creo que hago de todo”, dijo el 22 de abril del 2010, unos meses antes de citar a Umberto Eco (“odio a los deportistas”) para remarcar acto seguido que él lo que odiaba era, sin más, “el deporte. ¡Qué manera de sobrevalorar lo físico!”. Aunque parece que no del todo como espectador, porque el 7 de julio del 2010, día de la semifinal del Mundial de fútbol que enfrentaba a España con Alemania, exclamó: “Hoy es día de ganar y follar!!”. Consciente de los problemas que ello podía acarrearle, ayer tuiteó que piensa “mimar y amar” el deporte porque es “respeto, superación, humildad, perseverancia”. Y ayer acompañó al rey Felipe a despedir a la selección española de fútbol, antes de que los jugadores partieran hacia Rusia.
Las referencias al sexo –por inusuales en un ministro– han llamado la atención. Desde comentar lo bien que le quedaba un escote a su compañera Ana Rosa Quintana (diciendo que sus pechos “son de premio español”) a quejarse de que el calor le quita las ganas de sexo.
Independientemente de que sus novelas comerciales puedan gustar más o menos, los tuits que publica sobre sus lecturas indican que Huerta es un buen lector, que está al día tanto de autores en español (de Agustín Fernández Mallo a Menchu Gutiérrez pasando por Pablo Simonetti o nombres más clásicos como Emilio Lledó o su admirada Ana María Matute) como en el campo internacional (Tom Perrotta, Myklós Bánffy, Philip Roth, Patrick Modiano...). En cuanto a cine, tras ver, el pasado 28 de mayo, Las estrellas de cine no mueren en Liverpool tuiteó: “Hace tiempo que no veía una película tan bonita. O que tanto me gustara”. Y en el apartado musical, ha manifestado recientemente su querencia por Maria Rodés o, más nostálgicamente, por el grupo infantil Parchís.
Tras ser nombrado ministro, se criticó que, en su auto-definición de Twitter hubiera un enlace a la web de Amazon –el gran enemigo de las librerías tradicionales– con todos sus libros publicados. Sensible a esos comentarios, ayer ya lo había retirado.
El 29 de mayo del 2010, escribió “me cago en el puto independentista”, refiriéndose al espontáneo que saltó al escenario de la final de Eurovisión con una barretina durante la actuación de Daniel Diges. Eurovisión es objeto, cada año, de sus comentarios y es necesario contextualizarlo porque si no algunos de sus tuits referidos a actuaciones concretas pueden pasar por otra cosa. Ejemplos: “Todos son negros en Francia?” (29 de mayo del 2010) y, del mismo día, “Veo mucho gay... o es cosa mía?”.
Sus 362.000 seguidores conocen también su postura contraria a las corridas de toros, pues han podido leerle en alguna entrevista frases como que la tauromaquia es “el acto más estúpido y brutal de este país y algunos, todavía, invocando a la cultura. Y así seguimos. Brutos y estúpidos”.
En un tono informal, comentó, tras el cambio de presentadoras en el Telediario del 2012: “Yo creo que Felipe va a dejar a Letizia por la nueva que han puesto”. Y, el pasado 7 de mayo, dijo: “Abrir un bote de alcachofas para cenar es ser un soltero nivel 10”.
Ayer mismo, el ministro volvió a tuitear, pero ya en otro tono, para agradecer los apoyos del cineasta J.A.Bayona, la escritora Rosa Montero o la cantante Vanesa Martín. A lo mejor, quién sabe, se acordaba del tuit que escribió el 3 de enero del 2017: “Que le quiten el twitter a los políticos de las manos. Por su bien”.