La Vanguardia

Tiempo de LeBron, época de Warriors

- Juan Bautista Martínez

LeBron James es el líder, el patrón, el mejor jugador de la NBA. Hasta el punto de que sus gestas y sus continuas presencias en las finales han despertado un debate que los más veteranos entienden que es un anatema: compararlo con su majestad Michael Jordan. Partiendo de la base de que Air sólo hay uno e inimitable es justo decir que la regularida­d y el abanico de prestacion­es del alero de Cleveland son elogiables desde cualquier punto de vista. Pero James ha ido a estamparse contra un iceberg, contra un equipo en el mejor sentido de la palabra. Es tiempo de LeBron pero es época de Warriors.

El juego dinámico de Golden State ha cambiado la fisonomía de la NBA, al estilo de lo que hicieron los Lakers de Magic en los ochenta. En aquel equipo histórico un día decidía el genial base, otro lo hacía Worthy y muchos seguía respondien­do un tal Abdul Jabbar. Lo mismo ocurre con los Warriors. En el último partido de la final emergió la figura de un Curry de fantasía, pero en el anterior el que resolvió como un martillo pilón lucía el dorsal 35, el de Kevin Durant. Y si no, lanza Klay Thompson. Siempre dentro de un engranaje de baloncesto rápido, ofensivo y seductor, con espacio incluso para la bronca que aporta Draymond Green. Demasiados frentes abiertos incluso para la potencia de James, siempre multiplicá­ndose, siempre exprimiénd­ose hasta el límite.

En los próximos días la NBA mirará con lupa a LeBron, pendiente de resolver su futuro. Buenos amigos suyos, como el exjugador Chris Bosh, apuntan a que el alero abandonará los Cavaliers para mudarse de conferenci­a y aterrizar en los Rockets. De hecho, Houston estuvo muy cerquita de eliminar a Golden State y si no lo hizo fue en buena medida porque Chris Paul se lesionó. James necesita nuevos aliados para enfrentars­e a Golden State. Uno solo por muy grande que sea, no puede.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain