Nuevos factores de riesgo
En los hospitales ven menos anorexias clásicas, las de chicas jóvenes de 16 a 18 que restringen sus comidas y son extremadamente perfeccionistas y rígidas. La edad se ha extendido por arriba y por abajo, empiezan antes y también más tarde, y los trastornos resultan mucho más heterogéneos y asociados a otros problemas de salud mental y de consumo de sustancias. “Hay una realidad distinta, sobre todo una realidad paralela a través de las redes que sabemos que les está influyendo”, explica la directora de la asociación ACAB, Sara Bujalance. “Aunque desconocemos exactamente cómo, nos ha pillado por sorpresa a los adultos. Vivimos en un mundo de gran consumo y lleno de estímulos y es posible que no estemos educando emocionalmente a los niños para saber manejarse en él”. Entre el 5% y el 6% de las adolescentes tiene algún TCA.