Ambiente de distensión en Brasil
La selección de Brasil efectuó ayer su primer entrenamiento en Rusia con 5.000 aficionados en las gradas y centenares intentando seguir los acontecimientos desde el exterior del recinto. Fue una sesión muy suave y distendida en la sede de Sochi, caracterizada por las bromas a Coutinho con motivo de su 26.º cumpleaños. Los compañeros rompieron un huevo en la cabeza del futbolista del Barça y lo cubrieron de harina. Es la tradición.