Un hombre se tira de un décimo piso cuando le querían desahuciar
Un vecino de Cornellà de Llobregat de 45 años se precipitó ayer desde un décimo piso cuando la comitiva judicial y los Mossos d’Esquadra se desplazaron hasta su casa para ejecutar una orden de desahucio por impago de las cuotas del alquiler.
A las 10.30 horas la comitiva judicial se personó en la vivienda situada en el pasaje de la Camèlia del barrio de Sant Ildefons, un enclave repleto de vecinos humildes ayer de luto. El hombre se negó a abrirles. Por eso después la comitiva fue acompañada por la policía catalana. Llamaron a la puerta y el ocupante del piso preguntó quién estaba detrás. Cuando constató que eran los Mossos decidió suicidarse tirándose por la ventana. Murió al instante, víctima del impacto. Los agentes escucharon los gritos de desconsuelo de su mujer, que fue trasladada al centro de urgencias y emergencias sociales de Barcelona en estado de shock. En la vivienda sólo vivía esta pareja.
La propiedad del piso es de una entidad bancaria, según informaron ayer fuentes del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC). El banco interpuso la primera demanda en noviembre del 2017 después de siete mensualidades impagadas. La denuncia fue notificada al inquilino, que no compareció ni tampoco solicitó un abogado de oficio, en enero de este año.
El primer intento de lanzamiento se realizó el pasado 13 de marzo pero se suspendió hasta el 22 del mismo mes. Un día antes se recibió un informe de los servicios sociales del Ayuntamiento de Cornellà alertando de la situación de vulnerabilidad del demandado. Se volvió a aplazar hasta ayer.
El hombre, que también tenía problemas de adicción a sustancias estupefacientes, estaba siendo atendido por los servicios sociales municipales. De hecho, la pareja formaba parte de la larga lista de espera para conseguir un alquiler social.
La concejal de Política Social, Montse Pérez, aseguró ayer que el Ayuntamiento valora emprender acciones legales contra el Banco Popular, propietario del piso. Los servicios jurídicos municipales están estudiando el caso. “Un banco no tiene tanta urgencia para recuperar una vivienda”, argumentó horas después del suceso la portavoz de la administración municipal.
El miércoles, un día antes del suceso, el Ayuntamiento trasladó a los juzgados otro informe avisando del grave riesgo de exclusión social de la pareja. Pedían otro aplazamiento, que no se acordó. Ayer mismo la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Cornellà paralizó tres desahucios. Desconocían la situación de esta pareja.
El Ayuntamiento de Cornellà estudia acciones legales contra el banco propietario de la vivienda