Blue Spot, sobre la ciudad y el mar
En Compañía de Lobos abre su restaurante más espectacular, al que se han sumado como socios Piqué y Shakira, con vistas de 360º, brasas y ambiente diferente para el día y la noche
Esta semana han empezado a arder las brasas del nuevo Blue Spot en el ático del edificio Ocean (paseo Joan de Borbó, 101): mil metros cuadrados de superficie con las cocinas en el centro y unas espectaculares vistas de 360º sobre la ciudad y el mar. Un espectáculo con el que tratará de compartir protagonismo la brasa, presente en una carta dividida en bocados para picar (muy interesantes el hummus, papadam y especias libanesas o el niguiri de gamba), entrantes sabrosos como la sopa fría de buey de mar con un toque de humo, arroces (recomendable el de gambas con ceps a la brasa) o pastas (correcto el cappeletti de pato);
Tendrá un ambiente de día, más informal, y otro de noche, cuando se transformará en una especie de club
pescados del día, carnes y postres, algunos también con el toque ahumado, como los fresones con yogur.
Cuando habían decidido que se plantaban porque ya tenían suficientes restaurantes, Tomás Tarruella y su primo Perico Cortés, del grupo En Compañía de Lobos, encontraron este local al que era imposible resistirse. Según el primero “porque nos enamoramos del espacio, pensábamos que aportaba algo distinto a Barcelona y no pudimos decir que no”. Se han sumado al proyecto como socios Gerard Piqué, Shakira y el empresario Joan Mas. Tarruella ha vuelto a confiar en el arquitecto que creó su exitoso vegetariano The Green Spot, el brasileño Isay Weinfeld, que ha hecho un trabajo exquisito tanto en el espacio interior, que cuenta con una barra con carta propia, como en los dos comedores interiores y en las diferentes terrazas.
Habrá dos ambientes, el de día y el de noche, cuando se añadirán nos platos más elaborados y la puesta en escena será algo más formal. Al frente de la cocina, Àlex Duran, 12 años en el restaurante Negro, y Mariano Citterio , que ha cambiado el naranja chillón del desaparecido Nobuk por el azul del mar frente al que cocina. Por la noche el Blue Spot se convertirá en el Blue Monkey, una especie de club en el que la noche se alargará con cócteles y música. Todo, según Tarruella, para que sea un local en el que la gente se sienta a gusto y lo pase bien.