De comisaría central a complejo artístico

Los habitantes de Hong Kong acostumbran a decir, con un cierto aire de despreocupación, que esta ciudad tiene la capacidad de reinventarse a si misma con tal de superar todo tipo de crisis y mantenerse en el candelero de las urbes más fascinantes del planeta. Un ingenio que ahora se ha vuelto a poner en evidencia con la inauguración del centro artístico Tai Kwun, en Hollywood Road, en pleno corazón de la excolonia británica, en el distrito de Central. Sin duda, la parte de la ciudad más trepidante en todos sus aspectos. Allí confluyen bancos, restaurantes, galerías de arte y tiendas de antigüedades, en un entramado de calles estrechas y aceras diminutas que, unido a un intenso tráfico, puede acabar agobiando al peatón más paciente. Justo allí, acaba de ver la luz un enorme y ambicioso proyecto iniciado hace una década y que está llamado a transformar toda esa área urbana. Se trata del centro artístico Tai Kwun, un complejo que cubre una extensión de 13.600 metros cuadrados y constituye un ejemplo de conservación urbana.Y es que Tai Kwun o Big Station, como se llamaba popularmente a este recinto, va camino de erigirse en uno de los principales reclamos culturales de Hong Kong, tras borrar los siniestros recuerdos que provocaba en la población local. Inmuebles que entre 1864 y el 2006 albergaron la comisaría central de policia, la magistratura central y la cárcel Victoria.