La mujer imposible de 007
Fue siete veces la superiora de 007 en el papel de M, jefa de los servicios secretos británicos, hasta que en la última aparición perdió la vida en la pantalla. Así terminó como mujer implacable, la única que no cayó en los brazos de James Bond. Al contrario, le trataba con cierto sentimiento de odio, tildándole de misógino y de reliquia de la guerra fría, aunque también le dio cobijo maternal. Las riendas de un personaje de tal calibre sólo podían estar en manos de Judi Dench, una dama forjada en los escenarios, digna de la prestigiosa tradición dramática inglesa.
Dench es una actriz muy activa a sus 83 años. Tan sólo en el 2017 estrenó un par de películas, un remake de Asesinato en el Orient Express y La reina Victoria y Abdul. En este último filme se pone en la piel de la aguerrida monarca que ya interpretó en Su majestad Mrs. Brown (1997). Recientemente ha declarado que pese a la edad mantiene el deseo sexual. Por otro lado, padece una degeneración macular que le impide leer y necesita que alguien le recite los guiones para memorizarlos. Al margen de su carrera cinematográfica, a la actriz le apasiona especialmente el teatro.
Su padre, el inglés Reginald Arthur, estudió medicina en el Trinity College de Dublín, donde conoció a quien sería su madre, la irlandesa Eleanora Olive. Judith Olivia Dench nació en diciembre de 1934 en York, al norte de Londres. Que uno de sus hermanos, Jeffrey, fuese actor le influyó en su futura formación y profesión, pero quizá más el hecho de frecuentar de pequeña el teatro de la ciudad donde el padre ejercía de médico residente y la madre se encargaba del guardarropa.
Dench demostró pronto aptitudes para la interpretación. Le encantaba disfrazarse y bailar mientras
La actriz sigue muy activa a sus 83 años: tan sólo en el 2017 estrenó un par de películas
su madre tocaba el piano. En la escuela de teatro del Royal Albert londinense tuvo como compañera a Vanessa Redgrave.
Debutó en 1957 en un Hamlet con la Old Vic Company. En 1961, se unió a la Royal Shakespeare Company. Exploró todo el universo femenino del dramaturgo, de Ofelia a Julieta, pasando por Lady Macbeth. No ambicionaba el mundo del cine pero la cuestión era tener trabajo. Pronto fue contratada para una serie de la BBC y en 1968 cautivó a los espectadores en una versión de Cabaret en la que hacía de Sally Bowles. Vinieron más musicales: en 1981 intervino en una producción de Cats y en 1995 en una reposición de A little night music de Stephen Sondheim.
Las apariciones en las películas de James Bond empezaron junto a Pierce Brosnan en Goldeneye (1995) y terminaron con Daniel Craig en Skyfall (2012). Cuando le notificaron que moriría en esta entrega, la actriz rompió a llorar. El asesino de la excelsa señora fue interpretado por un Javier Bardem con el pelo oxigenado. Dench, para articular el personaje, se inspiró en Stella Remington, la mujer que en la realidad fue directora del MI5 de su majestad entre 1992 y 1996. La intérprete ganó un Oscar como mejor actriz secundaria por una aparición de ocho minutos en Shakespeare in love (1998) y ha sido nominada varias veces más. Entre los filmes en los que ha participado están Una habitación con vistas (1985), Chocolat (2000), Iris (2002), Mrs. Henderson presenta (2005), Orgullo y prejuicio (2005), Diario de un escándalo (2006), Philomena (2013) y El nuevo exótico hotel Marigold (2015).
Los casi treinta años de matrimonio con el actor Michael Williams se truncaron con su muerte en el 2005. Juntos habían rodado varias series de televisión. La hija de ambos, Finty Williams, que también es actriz, la hizo abuela en 1997. Hace un par de años, Dench no dudó en realizarse su primer tatuaje. Desde el 2010 vive con David Mills, un ecologista ocho años más joven que ella, con quien le gusta pasear por el bosque. El pelo corto y blanco que realza el azul de sus ojos da un toque elegante a su sobriedad.