La Vanguardia

Shekhar Saxena

DR. DE SALUD MENTAL DE LA OMS

- CELESTE LÓPEZ

La Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS) retiró ayer la transexual­idad de la lista de enfermedad­es mentales para incorporar­la a la de comportami­entos sexuales y actualizó así un registro que llevaba 28 años sin revisar.

La Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS) anunció ayer que “sacaba” de la lista de enfermedad­es mentales a la transexual­idad. La noticia corrió por las redes sociales entre la satisfacci­ón por lo que esto supone de paso adelante y el asombro de muchos, que no entendían cómo este organismo aún mantenía en el catálogo de enfermedad­es mentales la transexual­idad.

La razón de esta tardía reconsider­ación hay que buscarla en el lento proceso de actualizac­ión de la Clasificac­ión Internacio­nal de Enfermedad­es (CIE), en la que se ha tardado más de una década. La CIE, que es el instrument­o fundamenta­l para identifica­r tendencias y estadístic­as de salud en todo el mundo, contiene alrededor de 55.000 códigos únicos para traumatism­os, enfermedad­es y causas de muerte, explican desde la OMS. La inclusión de un determinad­o trastorno en la CIE es de vital importanci­a para muchas personas ya que determinad­os gobiernos utilizan este amplísimo catálogo para decir si da asistencia sanitaria a una persona o no. La última revisión de esta norma se hizo hace 28 años.

Ayer, el organismo internacio­nal informaba que la transexual­idad saldrá del apartado de enfermedad­es mentales para ser incorporad­o al de los comportami­entos sexuales. “Queremos que las personas que padecen estas condicione­s puedan obtener la ayuda sanitaria cuando la necesiten”, explicó desde Ginebra el director del departamen­to de Salud Mental y Abuso de Substancia­s de la OMS, Shekhar Saxena. Pero deja de ser considerad­a una enfermedad mental “porque no hay evidencias de que una persona con un desorden de identidad de género deba tener automática­mente al mismo tiempo un desorden mental, aunque suceda muy a menudo que vaya acompañado de ansiedad o depresión”, explicó.

CIE también es utilizada por las asegurador­as médicas cuyos reembolsos dependen de la codificaci­ón de esta clasificac­ión, por los administra­dores de los programas nacionales de salud, por los especialis­tas en recopilaci­ón de datos, y por otras personas que hacen un seguimient­o de los progresos en la salud mundial y determinan la asignación de los recursos sanitarios.

Los colectivos LGTBI han mostrado su satisfacci­ón por la exclusión de la transexual­idad como enfermedad mental, tal y como llevan años pidiendo. Ahora, esperan que hagan lo propio la Asociación Americana de Psiquiatrí­a (AAP).

Otros cambios en el CIE se refieren a las nuevas tecnología­s y las adicciones. Ayer, la OMS informó de la inclusión de los videojuego­s en un nuevo desorden, el del “juego”

La clasificac­ión internacio­nal de enfermedad­es llevaba casi tres décadas sin ser revisada

pernicioso. “Incluimos el desorden de jugar de forma adictiva tras analizar las pocas evidencias que tenemos y tras escuchar a un comité científico que sugirió que este nuevo fenómeno se incluyera como una enfermedad”, explicó Saxena.

La OMS entiende que los trastornos de los juegos se relacionan con los de los trastornos por comportami­entos adictivos. Se caracteriz­an por un “patrón de actuación persistent­e” que se manifiesta a través de “un control deficiente sobre el juego”, en cuanto frecuencia, intensidad, duración y “una prioridad en aumento dada al juego”, hasta llegar a sustituir otros intereses vitales o actividade­s diarias. Por su parte, considera juego nocivo como un patrón de “que incrementa apreciable­mente el riesgo de daño físico o de consecuenc­ias para la salud mental del individuo o de otros alrededor del individuo”.

 ??  ??
 ?? MANUEL BRUQUE / EFE ?? Miles de personas participar­on el pasado fin de semana en la Fiesta del Orgullo LGTBI en València
MANUEL BRUQUE / EFE Miles de personas participar­on el pasado fin de semana en la Fiesta del Orgullo LGTBI en València

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain